al-Baraa' رضي الله عنه dijo: Vi al Mensajero de Allah ﷺ el día (de la batalla) de la Trinchera (al-Ahzaab) cargando tierra hasta que el pelo de su pecho estaba cubierto de polvo. Recitaba la siguiente poesía de `Abdullaah (Ibn Rawaahah):
“Oh, Allah, de no haber sido por Ti, no habríamos sido guiados...
... Ni habríamos dado en caridad, ni habríamos rezado.
Así pues, por favor, desciende sobre nosotros tranquilidad...
... Y haz que nuestros pies se mantengan firmes cuando nos encontremos con el enemigo.
Porque, en verdad, los enemigos se han rebelado contra nosotros...
... Pero si quisieran ponernos en aflicción (es decir, luchar contra nosotros), no huiríamos (sino que los resistiríamos).
El Profeta ﷺ solía elevar su voz mientras recitaba estas líneas de poesía.
📚 [Sahihain]
Tomado de: t.me/ilm4all/4367
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