💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor @libroscatolicosgrabados Channel on Telegram

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

@libroscatolicosgrabados


DIARIO DE SOR FAUSTINA
5 -04-17-- 8-06-20
HISTORIA DE UN ALMA
18-06-20 -- 20-11-20
IMITACIÓN DE CRISTO
23-11-20 --21-02-21
TRATADO DE LA D. A LA VIRGEN MARÍA
24-02-21--19-05-21
LOS SILENCIOS DE S. JOSÉ
24-05-21--29-08-21
VIDA DE S. JOSÉ
06-09
OMNIA

💐 Libros católicos grabados 💐 Apóstoles de Su Amor (Spanish)

¡Bienvenidos al canal de Telegram 💐 Libros católicos grabados 💐 Apóstoles de Su Amor! Este canal está dedicado a compartir grabaciones de libros católicos para que puedas escuchar y disfrutar de la palabra de Dios en cualquier momento y en cualquier lugar. Si eres un amante de la literatura religiosa y buscas enriquecer tu vida espiritual, este canal es perfecto para ti. Aquí encontrarás una amplia variedad de libros católicos grabados por apóstoles de Su amor, que te ayudarán a profundizar en tu fe y crecer como cristiano. ¡No te pierdas esta oportunidad única de acceder a estas joyas literarias espirituales! Únete a nosotros en este viaje de descubrimiento y aprendizaje. ¡Te esperamos con los brazos abiertos en 💐 Libros católicos grabados 💐 Apóstoles de Su Amor!

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

20 Jan, 01:43


🌳☀️🌳🙏🏻🌳☀️🌳

*Estimados Orantes*

Nos complace informarles que con el envío del domingo 19 de enero, la entrega 100 , culminó el libro *INTRODUCCION A LA VIDA DE ORACIÓN* de Romano Guardini

Iniciaremos la invitación a nuestro próximo libro, el cual comenzaremos a compartir el martes 28 de enero

Compartiremos *MUESTRAME TU ROSTRO*.
*Hacia la intimidad con Dios* de Ignacio Larrañaga

Recuerden que en la descripción del grupo encontrarán el link para invitar a sus conocidos.
Hemos habilitado la opción de que pueda unir miembros a este grupo.

_Dios nos siga bendiciendo_

*Apóstoles de Su Amor*

🌳☀️🌳🙏🏻🌳☀️🌳

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

20 Jan, 01:41


💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💥 *INTRODUCCIÓN A LA VIDA DE ORACIÓN*💥

*Romano Guardini*

*Entrega 100*


🌱 *EPÍLOGO*🌱

No es fácil escribir sobre temas relativos a la vida religiosa, pues, al hacerlo, puede parecer que uno da por hecho que posee una experiencia relevante en estas cuestiones o, al menos, que realiza en su vida lo que presenta en sus escritos como auténtico. Tampoco es aconsejable manifestar que no intenta uno afirmar eso, pues ello es obvio, y decirlo expresamente puede resultar sospechoso. Nunca la dualidad entre obra escrita y vida personal es tan inquietante como aquí.
Ruego, por ello, al lector que tome nota de que el autor de este libro por lo menos ha reconocido esta dificultad inherente al hecho de escribir sobre temas religiosos y ha intentado alcanzar, aunque sea de lejos, un cierto equilibrio. En definitiva, alguien debe haber que trate estas cuestiones. Y, si se niega la exigencia de que sólo pueda escribir sobre la vida religiosa el muy experimentado en la vida cristiana –aunque sólo sea porque éste se opondría a ello con toda decisión–, lo más adecuado es realizar esta tarea ateniéndose plenamente al asunto tratado y a la doctrina de la Iglesia, y dejando de lado los puntos de vista personales.

*Fin del libro INTRODUCCIÓN A LA VIDA DE ORACIÓN DE ROMANO GUARDINI*

*Apóstoles de Su Amor*

💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

18 Jan, 20:15


💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💥 *INTRODUCCIÓN A LA VIDA DE ORACIÓN*💥

*Romano Guardini*

*Entrega 99*

🌱 *IX- VISIÓN CONJUNTA DE LA VIDA DE ORACIÓN*🌱

*LA UNIDAD DE LA VIDA DE ORACIÓN*( Continuación)

A la inversa, la persona individual necesita, para su oración personal, unirse a la oración de la Iglesia. Y no sólo para que la fe de la Iglesia le sirva de apoyo y se vea rodeado por el fervor de toda la comunidad que intercede por él. En el ámbito de los seres vivos, la fuerza es, al mismo tiempo, debilidad. Lo que constituye la característica peculiar de la oración personal, a saber, la soledad del diálogo íntimo, la libertad de movimiento y la espontaneidad de la
expresión puede convertirse en un peligro. La soledad puede degenerar en aislamiento, la libertad en arbitrariedad, la espontaneidad en extravagancia. La personalidad del hombre se desarrolla abriéndose a lo objetivo y omnicomprensivo. La liturgia es un «canon de la oración» no sólo porque al creyente que se adentra en su ámbito le dice cómo ha de realizar el servicio divino, sino, en un sentido más profundo, porque le indica las normas imperecederas que garantizan la autenticidad y la salud de toda oración. Es muy distinto que la oración sea «personal» y que sea
«subjetiva». La oración personal brota de la dignidad del hombre responsable, de la capacidad creativa de su vida interior, de la disposición al diálogo del hombre redimido con su Creador y Redentor. La oración subjetiva tiene su origen en el espíritu egoísta que sustituye la verdad por la «sinceridad» y considera como norma última de conducta la propia sensibilidad religiosa, con toda su inestabilidad. El creyente debe ajustarse una y otra vez a la ordenación de la liturgia, participar de la elevación de sus pensamientos y seguir la marcha bien reglada de sus actos y gestos. De lo contrario, su oración personal puede convertirse en algo aislado, sentimentaloide o extravagante, incluso antinatural y enfermizo.
Algo así cabe decir de las prácticas religiosas populares. Cuando la vida litúrgica no es rectamente comprendida, amada y cultivada, las prácticas religiosas populares entran en un proceso peculiar de degeneración. Los peligros a que estas prácticas están expuestas son la insuficiencia de las ideas, la fantasía descontrolada, la desmesura y el desorden de los sentimientos. Si las prácticas religiosas populares quedan abandonadas al libre juego del fervor religioso, su contenido dogmático se empobrece, sus formulaciones se vuelven inseguras, las repeticiones se amontonan y el sentimiento se hace inauténtico y blando. La vida religiosa de una comunidad en la que no ocupa la liturgia el lugar que le corresponde y se alimenta del todo o preferentemente de las expresiones populares de la religiosidad, se depaupera necesariamente. La oración pierde sustancia y se empequeñece.Pero tampoco debe olvidarse el otro aspecto. Existe una especie de celo litúrgico que considera las prácticas religiosas populares como algo más bien mediocre o superfluo. Es la mentalidad que reduce la oración personal a una mera apropiación de lo litúrgico. Tal postura es falsa y peligrosa. A su modo, hace algo semejante a quien dijera: «A mí me basta la humanidad. No necesito ningún pueblo. Me basta el mundo. No necesito ninguna patria». Las prácticas religiosas populares son para la vida religiosa lo mismo que es para la vida cotidiana la vinculación a la patria, la familia, el pueblo y el paisaje. Una buena práctica religiosa vespertina o el Santo Rosario bien rezado al atardecer son algo hermoso, profundo e íntimo que –hablando en general– la vida interior de los cristianos necesita para conservarse sana.( Continuará)

*Apóstoles de Su Amor*

💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

17 Jan, 20:13


💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💥 *INTRODUCCIÓN A LA VIDA DE ORACIÓN*💥

*Romano Guardini*

*Entrega 98*

🌱 *IX- VISIÓN CONJUNTA DE LA VIDA DE ORACIÓN*( Continuación)

*LA UNIDAD DE LA VIDA DE ORACIÓN*

Las diversas formas de oración no están meramente yuxtapuestas sino vinculadas por multitud de relaciones. La historia muestra cómo, sin cesar, partes de una pasan a otra. Algunos elementos de la liturgia han brotado de la vida personal de creyentes piadosos, y la vida de piedad de personas individuales se nutre frecuentemente de la acción litúrgica y utiliza textos del misal y el breviario. Por lo que toca a las llamadas prácticas religiosas populares, es de notar que buen número de elementos de la liturgia fueron originariamente modos de expresar la vida religiosa en una determinada diócesis o país y luego alcanzaron validez universal. Y viceversa, muchas partes de los ejercicios de piedad popular vienen a ser textos litúrgicos flexibilizados.
* * *
Pero las conexiones entre ambas formas de oración son aún más profundas que las interrelaciones históricas apuntadas. La oración litúrgica y la oración personal se apoyan mutuamente. Cada una de ellas tiene, ciertamente, sus propias raíces y debe conservar su peculiaridad, pero ambas están mutuamente vinculadas y constituyen la totalidad de la vida cristiana.En la liturgia realiza la Iglesia el santo servicio divino establecido por Cristo, y cada creyente debe incorporarse a él. Pero ha de vivir también su vida religiosa desde la intimidad de su ser personal, si quiere evitar que la oración litúrgica se convierta en algo meramente externo y carente de vida.Ciertamente, es la Iglesia quien realiza este servicio divino, pero éste cobra realidad y vida en los hombres individuales: en este sacerdote, en este creyente. Es la actividad de la Iglesia la que realiza la liturgia, pero esa actividad debe ser vivificada por la vida interior de las personas concretas. Si éstas no han aprendido a encontrarse con Dios; si su oído no está atento y su boca no se ha abierto al diálogo, la acción litúrgica carece de interioridad; es puesta en escena de modo superficial. Quien oye, habla y actúa no es un auténtico «alguien», sino un «algo» indeterminado. Todo el proceso litúrgico queda entonces desprovisto de su vitalidad y seriedad. Únicamente cuando la persona ora también como persona particular, puede la gran oración de la Iglesia alcanzar su propia libertad y su verdad.( Continuará)

*Apóstoles de Su Amor*

💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

17 Jan, 20:12


💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💥 *INTRODUCCIÓN A LA VIDA DE ORACIÓN*💥

*Romano Guardini*

*Entrega 97*

🌱 *IX- VISIÓN CONJUNTA DE LA VIDA DE ORACIÓN*🌱( continuación)

*LAS PRÁCTICAS RELIGIOSAS POPULARES*

La vida religiosa no se reduce al campo de la oración litúrgica y la oración personal. Debe añadirse una tercera forma de oración, que suele denominarse con una expresión no del todo feliz: piedad popular. A ella pertenecen los ejercicios piadosos que se realizan en las iglesias, el rezo común del Rosario en familia, la mayor parte de los rezos populares...
No es fácil precisar el alcance de esta forma de oración. Lo mejor es decir que ocupa un lugar intermedio entre la oración litúrgica y la personal. Es distinta de ambas. Frente a la oración personal,
presenta un carácter comunitario, pues no expresa las actitudes y las necesidades de cada uno sino las de un grupo. Además, están reguladas por tradiciones y normas y gozan de cierta autoridad sobre cada uno de los creyentes. Por otra parte, tienen un carácter más privado que la liturgia, pues las prácticas de piedad popular no tienen vigencia en toda la Iglesia, ni a veces en toda una nación, sino sólo en una diócesis, lo que implica que cada diócesis tenga su propio libro de cantos y de oraciones. En casos, estas formas de piedad popular son distintas en las diferentes parroquias. De esta forma, el espíritu de las diversas épocas y las peculiaridades de los distintos lugares, los pormenores de la vida cotidiana y sus situaciones cambiantes hallan en estas prácticas piadosas una expresión más inmediata que en la liturgia, pues los cambios de ésta se producen más lentamente y su campo de aplicación es mucho más amplio.

* * *
Las prácticas religiosas populares son menos rigurosas que la liturgia. Sus palabras son más sueltas y abundosas, la fantasía juega un papel mucho mayor y la afectividad es más espontánea y cálida. En cambio, carecen de la noble andadura de la liturgia, de su condición enjuta y su fuerza expresiva. Cultivan el sentimiento y caen, a veces, en lo sentimental, lo arbitrario y extravagante.
Las formas de piedad popular aman la repetición. Un lema de la oración litúrgica reza así: «Nunca dos veces lo mismo». En cambio, las prácticas religiosas populares repiten incesantemente unos mismos elementos. Tienen el deseo de permanecer ante Dios. Como las comunidades parroquiales no suelen estar preparadas para rezar las oraciones con las que la liturgia llena las horas del día–es decir, los salmos–, repiten distintas oraciones, como el Padrenuestro o el Ave María. Resulta fácil participar en esta forma de oración; pero se corre el peligro de la monotonía y de la falta de atención.( Continuará)

*Apóstoles de Su Amor*

💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

15 Jan, 18:11


💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💥 *INTRODUCCIÓN A LA VIDA DE ORACIÓN*💥

*Romano Guardini*

*Entrega 96*

🌱 *IX-VISIÓN CONJUNTA DE LA VIDA CRISTIANA DE ORACIÓN*🌱

*LA LITURGIA*
( Continuación)

Como hemos indicado, el centro de gravedad de la liturgia radica en la acción litúrgica. Queremos insistir en ello porque esta idea se ha perdido en buena medida. El centro de gravedad de la vida
religiosa se ha desplazado cada vez más hacia la interioridad individual, el ámbito de las «vivencias», del pensamiento y de la voluntad. En la misma medida, las acciones litúrgicas han sido interpretadas como un medio para el adoctrinamiento y la edificación espiritual. En realidad, la acción litúrgica tiene por meta vivir los misterios cristianos a través de acciones simbólicas, realizadas con todo nuestro ser corpóreo-espiritual. Dios no sólo se manifestó a los hombres de modo puramente interior, sino también a través de acciones y palabras concretas, y de forma definitiva en la persona,la vida y el destino de Cristo. Así se realizó la «epifanía», la manifestación visible del Dios invisible. Consiguientemente, la recepción y realización en nuestra vida de lo que recibimos a través de Cristo tiene lugar de un modo histórico, es decir, de modo corpóreo-espiritual. La Iglesia no es sólo una trama de fe y de amor, una «Iglesia del espíritu»; se halla en la historia como una realidad visible, capaz de diálogo, dotada de responsabilidad y de poder. A ella le está encomendada la herencia de Cristo. En ella vive, como un don siempre renovado y asumido en la existencia terrena, el Señor glorificado, con su misión salvadora. Esta vinculación al Señor se da de formas diversas: mediante el pensamiento y la veneración, la decisión a favor de Cristo y la imitación, y a través de ciertas acciones, que deben realizarse aquí y ahora de forma precisa. Así, por ejemplo, Cristo resucitó una vez por todas, y la fe puede hacerse cargo de ello en cada momento. Sin embargo, es también cierto que el creyente se encuentra de un modo especial ante la verdad, la gracia y el sagrado poderío de la resurrección de Cristo en un determinado momento y de una forma singular, a saber: en la celebración litúrgica de la Pascua de Resurrección. Cristo, que dijo: «Donde dos o tres estuvieren reunidos en mi nombre, allí estaré yo en medio de ellos»(Mt18,20), se hace presente en medio de la comunidad cristiana en la noche pascual. Cuando se entona el himno «Exultet» y brilla la luz nueva del cirio pascual, para multiplicarse luego por todo el ámbito del templo, los allí congregados pueden decir con toda seguridad: «Ahora es la Pascua, y el poder de la resurrección está entre nosotros».Todo esto no es una alegoría piadosa y edificante; es la plena verdad: la verdad de la acción litúrgica. Esta verdad se ha hecho en gran medida inaccesible al hombre moderno. Éste ha perdido la facultad de contemplar las formas y las imágenes, captar el sentido de los procesos, participar en acciones concretas dotadas de contenido divino y, así –en otro nivel–, continuar lo que indica San Juan al comienzo de su primera carta: «Lo que hemos oído, lo que hemos visto con nuestros ojos, lo que hemos contemplado y lo que nuestras manos han tocado de la palabra de la vida...» (1 Jn 1). El hombre moderno sólo quiere hablar y oír, pensar y juzgar. Pero esto solo no basta, y debe, por tanto, avivar las energías que ha descuidado durante largo tiempo y revitalizar los órganos que ha dejado atrofiar. Ha de aprender no sólo a reflexionar sobre las formas simbólicas sino a contemplarlas y, contemplándolas, comprenderlas; y a no preguntarse únicamente qué significan las diversas acciones sagradas sino a realizarlas, participando, así, de su contenido. Naturalmente, el que realiza la acción litúrgica debe comprenderla adecuadamente, ponerse plenamente a su servicio y realizarla de tal forma que el que se halle bien dispuesto pueda realmente «oír con sus oídos la palabra de la vida, contemplarla con sus ojos y tocarla con sus manos».( Continuará)

*Apóstoles de Su Amor*

💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

15 Jan, 01:10


*Estimados orantes*

_Vamos a rezar por la Vida y por los No Nacidos!_

Del 16 al 24 de Enero de 2025 se llevará a cabo *"9 Días por la Vida"*.

Esta Novena especialmente es en honor al Día Anual de Oración por la Protección Legal de los Niños No Nacidos, que se conmemora el 22 de Enero.

Comparta esta invitación para que la oración nos una y nos impulse en defensa de la vida.

*Link a grupo en Whatsapp:*

https://chat.whatsapp.com/GtB5MRUKzNi6unUhetEKRB

*Link a grupo en Telegram:*

https://t.me/adopcion_espiritualapostoles

No deje de visitar los otros sitios de Apóstoles de Su Amor en las redes:
https://linktr.ee/Apostoles_de_Su_Amor

Lo invitamos también a que visite y se una a nuestro canal.

https://whatsapp.com/channel/0029VaRdbbl3gvWbLVtaPG27

_Dios nos siga bendiciendo_

*Apóstoles de Su Amor*

🙏🏼⭐️

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

14 Jan, 22:02


💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💥 *INTRODUCCIÓN A LA VIDA DE ORACIÓN*💥

*Romano Guardini*

*Entrega 95*

🌱 *IX- VISIÓN CONJUNTA DE LA VIDA CRISTIANA DE ORACIÓN*🌱

*LA LITURGIA*( Continuación)

Esta Iglesia es la que actúa y habla en la liturgia. Por eso, la actividad de cada uno de nosotros cuando realizamos una acción litúrgica o recitamos las palabras de la liturgia es distinta de la actividad propia de la oración personal. No es algo que se dé al lado de ésta o en oposición a ella; es su necesario contrapolo en el conjunto de la existencia cristiana. En la acción litúrgica nos elevamos por encima de nuestra individualidad y nos convertimos en miembros del conjunto de la Iglesia, medios expresivos de su magnífica actividad y de su palabra. De aquí se deriva que todo lo que se denomina «ley» adquiere un sentido distinto. La oración personal brota de la espontaneidad del corazón, pero necesita estar regulada para permanecer sana y ordenada. En la oración y acción litúrgicas, por el contrario, tal espontaneidad no tendría sentido, antes conduciría a la arbitrariedad y la confusión. Eso llevó a la Iglesia a ordenar la acción litúrgica a través de múltiples experiencias y mediante constantes pruebas y reformulaciones. Tal ordenación no es sólo un consejo; es una norma que debemos obedecer todos los creyentes. En la liturgia no hay libertad. Mejor dicho, no hay libertad individual, porque libertad también la hay en ella. La libertad de la liturgia no pertenece a la voluntad de cada creyente particular, sino a la voluntad de la Iglesia, dirigida por el Espíritu Santo. Este modo de libertad se manifiesta en la ausencia de utilitarismo que caracteriza al la liturgia. La liturgia no intenta «conseguir» algo, sino solamente estar ante Dios, respirar hondo y desarrollarse espiritualmente, amarle y alabarle. Esta forma de libertad se expande en amplios círculos concéntricos por todo el ámbito del mundo a través de los siglos. La acción litúrgica desborda, en cuanto a su sentido y su radio de acción, la actividad de cada creyente individual y se convierte para éste en una norma de vida. La acción y la oración litúrgicas constituyen un «servicio divino» en un sentido más estricto que la oración personal. La acción litúrgica está regulada, según una tradición antiquísima, en todos sus pormenores. Los textos están revisados por la Iglesia y deben ser proclamados y rezados tal como se hallan en los libros litúrgicos. El modo de intervenir en la liturgia un creyente es tanto más auténtico cuanto más prescinde de sus deseos privados. En la oración personal puede seguir los impulsos de su corazón. Cuando participa en la acción litúrgica, debe abrirse a una fuente de vida que procede de un plano más profundo y poderoso: el corazón de la Iglesia, cuyo pulso late a través de los siglos. Lo decisivo aquí no es lo que le gusta a él, lo que le preocupa en cada momento, sus cuitas personales. Todo esto debe dejarlo de lado y adentrarse en el gran movimiento de la acción litúrgica. Y precisamente al alejarse de sí mismo, experimenta el primer efecto, siempre renovado, de la liturgia: nos hace desprendidos y nos libera.
( Continuará)

*Apóstoles de Su Amor*

💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

05 Jan, 21:07


💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💥 *INTRODUCCIÓN A LA VIDA DE ORACIÓN*💥

*Romano Guardini*

*Entrega 86*

🌱 *VIII- LA ORACIÓN EN TIEMPOS DE INDIGENCIA ESPIRITUAL*🌱


*DIFICULTADES PROVOCADAS POR UN CAMBIO INTERIOR DE VIDA*

Los seres vivos son muy variados. Por eso el que desee hablar de ellos debe situarse en una línea intermedia, bien seguro de que cuanto dice sólo puede aplicarse a los casos individuales de forma aproximada. El lector tendrá, a veces, la impresión de que lo dicho no es exacto o no lo es del todo. Rechazará algunas cosas, reducirá el campo de validez de otras, entenderá esto o aquello de forma distinta, y probablemente tendrá razón. Pero, si acertamos con la justa línea media, siempre encontrará algo provechoso.
Hasta aquí no hay mayor dificultad. Se agrava la situación cuando el lector afirma que no sabe qué hacer con lo que ha leído. Puede, por ejemplo, estar tan perfectamente centrado en la vida de oración que juzgue superfluos para él los consejos y las exposiciones que se le ofrezcan. Si esto responde a la verdad, no hay más que decir, y el lector debe tranquilamente dejar el libro de lado... Puede suceder que el lector esté muy dotado y posea disposiciones religiosas excepcionales o se debata con dificultades psíquicas que se salen de lo común. Tal vez viva en circunstancias especiales que sólo puedan ser enjuiciadas desde dentro. A tal persona habría que decirle,en primer lugar,que lo cotidiano puede tener, tal vez, para él más importancia de lo que piensa y no debe considerarse demasiado rápidamente como una excepción. Pero, si constituye un caso realmente excepcional, debe buscar quien le aconseje personalmente y le ayude a salir adelante.Finalmente, existe la posibilidad de que el lector afirme simplemente que no puede orar, de modo que lo dicho aquí es para él incomprensible o imposible. Este estado de espíritu podemos vivirlo todos, de una u otra forma, alguna vez, y no sólo alguna sino muchas. Ello nos insta a tratar este punto un poco más de cerca.
( Continuará)

*Apóstoles de Su Amor*

💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

04 Jan, 22:17


💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💥 *INTRODUCCIÓN A LA VIDA DE ORACIÓN*💥

*Romano Guardini*

*Entrega 85*

🌱 *LA ORACIÓN A LOS SANTOS Y A LA MADRE DE DIOS*🌱( continuación)

*MARÍA*

Tan esencial como la súplica es el gozo que suscita la santa y bella figura de María, la predilecta de Dios, ejemplo de gran fe y de adhesión profunda al misterio. Por eso, en la veneración de María se unen la meditación reflexiva y la alabanza jubilosa. Ambas dan lugar a diversas formas de piedad mariana y encuentran expresión artística en la poesía, la música, la arquitectura y la escultura.Pero lo que más profundamente orienta al creyente hacia María es el anhelo,ya antes mencionado, de morar en un ámbito de vida santa. El creyente quiere permanecer en la cercanía de María, en su campo de irradiación, en la intimidad de su misterio. La palabra«misterio» no equivale aquí a «enigma», algo no descubierto aún. Esto sólo importa al entendimiento o a la curiosidad. «Misterio» significa, más bien, un modo de ser singular, un poderío especial, una esfera de ser determinada por la presencia de Dios y por un hálito de vida eterna. Aquí es donde quiere morar el hombre que ora; ahí desea permanecer, respirar, sosegarse y alcanzar alivio y fortaleza interior, para poder luego continuar su vida con un corazón renovado.
Lo antedicho se condensa de forma peculiar en el rezo del Rosario, del que ya hemos hablado. En él se pide reiteradamente a María que asuma todas las necesidades que oprimen nuestra vida. El Rosario aúna la meditación y la reflexión sobre la figura de esa criatura llena de Dios que fue María y la participación gozosa en su colmada vida interior. Nos permite demorarnos pacíficamente junto a ella, y nos hace ver la importancia del papel que jugó en la obra redentora, pues nuestra meditación se dirige siempre a la vida de Cristo en cuanto constituyó el contenido mismo de la vida de su madre.

* * *
La veneración de María es algo verdadero y justo desde el punto de vista cristiano, y no fue un buen momento aquél en que se pensó
que, por el honor debido a Dios, debemos romper nuestra vinculación con la Madre de Cristo.
Esta reacción no se dio por casualidad. El hombre tiende a ensalzar excesivamente todo lo que ama. Por eso en la veneración mariana se introdujeron algunos elementos exagerados y fantásticos. A ello se añadió el influjo de las leyendas; la tendencia del pueblo a enmarcar la vida de sus personajes venerados en hechos extraordinarios y llenar su existencia de acontecimientos maravillosos. Y, por último, el sentimentalismo, la predilección por lo dulzón y lo blando. Todo esto causó grandes males en el campo de la devoción mariana. No es extraño que se hayan producido toda clase de críticas –justificadas o no– y que algunas personas bien intencionadas no encuentren el camino hacia María. No toleran las exageraciones y deformaciones, y, al no poder distinguir lo verdadero de lo falso, lo rechazan todo. Esto es una gran pérdida, pues la historia de la piedad cristiana muestra que la veneración de María, si es auténtica, se armoniza muy bien con un sentido muy vivo de la verdad cristiana( continuará)

*Apóstoles de Su Amor*

💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

04 Jan, 00:45


*Estimados orantes de Apóstoles de Su Amor.*

Para mantener la seguridad y la confianza dentro de nuestra comunidad, le pedimos que:
- *Agende a los administradores* de sus grupos
- *No comparta información personal o financiera*, recuerde que _Apóstoles de Su Amor_ nunca lo contactará por privado ni pedirá ningún dato o dinero.
- Tampoco usamos logo de Apóstoles de Su Amor ni de ninguno de nuestros grupos en el perfil personal.
- No responda llamadas de extraños ni comparta ningún código solicitado.
- Contacte a un administrador ante cualquier duda.

Gracias por su cooperación.

_Dios nos siga bendiciendo_

*Apóstoles de Su Amor*

🙏🏻

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

03 Jan, 21:24


💥🌱💥🥰💥🌱💥

💥 *INTRODUCCIÓN A LA VIDA DE ORACIÓN*💥

*Romano Guardini*

*Entrega 84*

🌱 *LA ORACIÓN A LOS SANTOS Y A LA MADRE DE DIOS*🌱( continuación)

*MARÍA*


Se hicieron cargo, asimismo, de que la maternidad de María estaba aureolada con el resplandor de la virginidad. Lo que dice la Sagrada Escritura sobre el mensaje del ángel y las preocupaciones de San José, su prometido, indican que María no perteneció a ningún varón (Lc 1, 26-38; Mt 1, 18-25). Por eso, la Iglesia vio realizada en María la unidad de la virginidad y la maternidad femeninas, y cumplidas ciertas expectativas primarias del género humano. En la veneración de María se une la confianza en el carácter inagotable del amor maternal con el pudor reverencial ante la dignidad de la virginidad. María es cercana y lejana a la vez;unida a nosotros y distante.
* * *
No es posible expresar en pocas palabras lo que lleva al creyente hacia María. Destaca, ante todo, la búsqueda de auxilio. María es la«consoladora de los afligidos», el «auxilio de los cristianos», la
«madre del buen consejo». En ella, que es la madre del Redentor, encuentra el creyente un amor inagotable, dispuesto a ayudarle en toda necesidad y aflicción. María es la elegida que fue elevada hasta la proximidad de Dios, pero no a la manera de una diosa que vive aislada en la beatitud de su excelsa naturaleza. Lo que es María lo es en el orden de la Redención, por la gracia de Cristo. Por eso sabe el cristiano que puede estar seguro de su amor. Y no podemos calcular lo que significa que podamos llevar todas nuestras preocupaciones –incluso las más calladas y ocultas– al campo de irradiación de tal amor. Eso explica que constantemente se dirijan a María las súplicas de los afligidos en busca de socorro. Este socorro no lo concede María por sí misma. Ni María ni los santos son poderes paralelos que actúen, al margen de Dios, con voluntad y poder propios. En el Reino de Dios, la voluntad divina es«todo en todos»
(1 Co 12, 6). Ciertamente, los bienaventurados gozan de una vida en plenitud y son, por tanto, dueños de su propio ser, pero lo son en Dios, y su voluntad personal sólo desea que se cumpla la voluntad divina. Si remedian las necesidades humanas, lo hacen según la voluntad de Dios. La Iglesia expresa esto cuando dice que los santos interceden por nosotros. Esta intercesión es la
que pide a María el hombre atribulado, seguro de que puede confiar en ella.( Continuará)

*Apóstoles de Su Amor*

💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

02 Jan, 22:25


💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💥 *INTRODUCCIÓN A LA VIDA DE ORACIÓN*💥

*Romano Guardini*

*Entrega 83*

🌱 *LA ORACIÓN A LOS SANTOS Y A LA MADRE DE DIOS*🌱( continuación)

*MARÍA*

Cuando María, tras la Ascensión de su Hijo, vivió con San Juan, fue seguramente visitada por los creyentes, que le preguntarían por Jesús, pues ella era la única que podía dar testimonio acerca de treinta años de su vida. Sobre ella había descendido el Espíritu Santo y le había enseñado a comprender el misterio de la vida de Jesús; el sentido auténtico de aquello cuya divina grandeza no había podido descubrir y que había «conservado en su corazón» durante toda su vida (He 1, 14; Lc 2, 50-51). María había llegado a saber de Jesús más que ninguna otra persona. Si alguien quería saber quién era Jesús, podía recurrir a la autoridad de los apóstoles. Pero existía también otra fuente de conocimiento, que provenía de una comunidad de vida, una pureza de corazón y una profundidad de amor tales que no podían ser superados en grandeza e intimidad: Era el conocimiento que de Jesús tenía su Madre. Resultaba, por tanto, inevitable que los hombres acudieran a Ella y le dijeran: «¡Háblanos de tu Hijo!». Tampoco debemos infravalorar todo lo que, merced a María, pasó a los relatos evangélicos. Los discípulos recibieron de ella datos que sólo ella podía saber. Además, sin duda ella iluminó, con su luz interior, sucesos conocidos de la vida de Jesús y ayudó a interpretarlos de una forma nueva.
Tampoco podemos dejar de pensar que los cristianos recurrirían a menudo a ella para que incluyese sus preocupaciones en su oración. Los cristianos veían lo íntimamente unida que estaba María con su Hijo, mientras esperaba que la llamase junto a Él. Por eso, seguramente, unos u otros le habrán dicho: «Acuérdate de mí en tu oración». Y así ha sucedido hasta nuestros días. La historia de la piedad cristiana da suficiente testimonio de ello, y quien sepa ver en las figuras artísticas y literarias de María algo más que meras creaciones estéticas, encontrará muy a menudo en ellas la expresión de un hondo espíritu cristiano.
* * *
Muy pronto, la confianza de los cristianos confirió a María el nombre de «Madre». Ella fue la madre de Jesús, que es «el primogénito entre muchos hermanos» (Rm 8, 29). No tardaron los cristianos en descubrir que el amor con que María rodeó a su Hijo se extendía también a los hermanos de éste.( Continuará)

*Apóstoles de Su Amor*

💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

01 Jan, 22:07


💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💥 *INTRODUCCIÓN A LA VIDA DE ORACIÓN*💥

*Romano Guardini*

*Entrega 82*

🌱 *LA ORACIÓN A LOS SANTOS Y A LA MADRE DE DIOS*🌱( continuación)

*MARÍA*

Entre los destinatarios de la oración cristiana ocupa un lugar especial María, la madre del Señor. María no es sólo la más grande entre todos los santos; es algo distinto y peculiar. Sobre ella se han dicho y escrito infinitas cosas. Muchas son hermosas y proceden de las fuentes más puras de la fe cristiana; otras son poco o nada loables. Debemos, pues, aclarar las ideas.
Si queremos determinar el carácter propio y la peculiar dignidad de María, apenas podremos hacerlo más acertadamente que exponiendolaescuetaverdaddequeeslamadredelRedentor.No

sólo la madre del hombre Jesús, en quien, como decían los gnósticos, se había adentrado después el Logos, sino la madre del Hombre-Dios, Jesucristo. «El Espíritu Santo vendrá sobre ti y elpoder del Altísimo te cubrirá con su sombra; por eso, el niño que nazca será santo y se le llamará Hijo de Dios» (Lc 1, 36). Ese niño, que se convirtió en parte del destino de María como mujer, era nuestro Redentor, el de nosotros y el de ella. No podemos decir nada más excelso de María. Al hacerse madre, se hizo cristiana. Al vivir para su hijo, alcanzó la madurez de la existencia cristiana. Su vida está unida con la vida del Redentor, no sólo como lo está la de todo hombre que ama al Señor, sino como la vida de la madre está unida a la de su hijo. María vivió la misma vida del Señor. La Sagrada Escritura nos relata con frases muy expresivas cómoMaría, con la fe más pura, siguió al Señor hasta la cruz.
* * *
El hijo de Dios se hizo hombre en María por obra del Espíritu Santo. En aquella hora, el poder del Dios Creador descendió sobre María, no a la manera como creó el mundo mandando «que se haga», sino por medio del corazón y del espíritu de aquella a la que había llamado: María. El mensaje del ángel fue a la vez promesa, exigencia y pregunta. La respuesta se dio con humildad y obediencia, pero también con libertad. Lo que significó para todos los hombres la venida del Redentor y para el mundo el comienzo de la nueva creación fue, además, para María el comienzo de la relación con Dios más íntima que es posible a una criatura. La vida, la pasión, la muerte y la resurrección del Señor, que para todos nosotros fueron prenda y comienzo de nuestra salvación, constituyeron, además, para María el contenido mismo de su existencia personal. Al prestar su singular colaboración a la obra redentora, María alcanzó su plena madurez de vida cristiana.( Continuará)

*Apóstoles de Su Amor*

💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

31 Dec, 22:05


💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💥 *INTRODUCCIÓN A LA VIDA DE ORACIÓN*💥

*Romano Guardini*

*Entrega 81*

🌱 *LA ORACIÓN A LOS SANTOS Y A LA MADRE DE DIOS*🌱

*LOS SANTOS*( continuación)

Puede ser para el cristiano muy importante acercarse de modo especial a un determinado santo. Hemos dicho que los santos son intérpretes de Cristo. En cada uno de ellos resplandecen y se hacen visibles algunos aspectos de la infinitamente rica y a la vez absolutamente simple plenitud de Cristo. Los santos son los
«exploradores» del Reino de Dios, los que investigan la elevación y la amplitud que tiene, así como la riqueza de sus posibilidades. Abren caminos que otros pueden luego recorrer, y crean formas de vida que pueden ser asumidas por quienes no hubieran sido capaces de configurarlas. Un santo elegido por su afinidad con nosotros puede muy bien convertirse en nuestro guía y maestro... Además de esto, la relación con un santo es, o al menos puede ser, mutua. Hemos recordado ya varias veces que los santos no sólo viven en los libros y las imágenes, sino realmente. Y aman a quienes están unidos a ellos en Cristo, de modo que son ilimitadas las formas de encuentro y comunión de vida que pueden surgir de esa relación.Hay un tipo de celo por la causa de Dios que encierra posibilidades destructivas. Para asegurarse de que nada se alce frente a Dios, elimina –por así decir– cuanto presenta, a su alrededor, un carácter sacro. El Evangelio nos relata un curioso suceso de la vida del Señor. Jesús está hablando con los fariseos, las personas más celosas por salvaguardar el honor del Único Dios. Los fariseos están fuera de sí porque el Señor se atribuye una prerrogativa que, según ellos, va contra el honor de Dios. Quieren lapidarlo, porque «Tú, siendo sólo un hombre, te haces Dios». El Señor les responde: «¿No está escrito en vuestra ley: Yo dije: sois dioses?Si la Ley (véaseelSalmo82)llamó dioses a los que se dirigió la palabra de Dios (los jueces del pueblo), y la Escritura no puede fallar, ¿por qué decís que blasfemo yo, que he sido consagrado y enviado al mundo por mi Padre, porque he dicho: Soy Hijo de Dios?» (Jn 10, 33-37).
Este pasaje es revelador. Los fariseos muestran celo por salvaguardar el honor de Dios, pero actúan de forma que encierran en un muro la riqueza que alberga el Ser Supremo. Se enfurecen contra todo lo que, a su entender, puede poner en peligro la unicidad de Dios, y eso los lleva a considerar como una blasfemia la revelación que hace Jesús de la vida trinitaria de ese mismo Dios... Aplicando lo dicho al tema que estamos tratando, es de notar que existe un único Dios, esencialmente santo, a quien corresponde todo honor y toda gloria, pero Él quiso que en aquellos hombres que, por la gracia de Cristo, encarnaron plenamente el amor a Dios y al prójimo se refleje la luz de la santidad de Dios, según el modo de ser y la capacidad de cada uno. También respecto a los santos puede suscitarse la misma reacción farisaica, y, por el celo de conservar el honor de Dios, destruir la riqueza que tal honor encierra. La verdadera piedad tiene muy clara la unicidad de Dios, pero ama y respeta todas las manifestaciones que pueda haber de su gracia en los redimidos.( Continuará)

*Apóstoles de Su Amor*

💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

05 Dec, 22:01


💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💥 *INTRODUCCIÓN A LA VIDA DE ORACIÓN*💥

*Romano Guardini*

*Entrega 55*

🌱 *V -LA ORACIÓN INTERIOR O MEDITACIÓN*🌱( continuación)


*NATURALEZA DE LA MEDITACIÓN*

El título de este capítulo no alcanza a determinar bien el contenido del mismo. Toda oración debe ser «interior» si no quiere limitarse a ser un mero movimiento de labios. Pero aquí la palabra
«interior» indica una forma de oración que tiende a sustituir el hablar por el silencio. Puede decirse que es una oración «reflexiva», por cuanto procura superar la diversidad y la dispersión de las distintas actividades espirituales para concentrarse en algunas sencillas y profundas. Podemos, por ello, utilizar aquí la palabra«meditación». Pero ésta no destaca suficientemente el deseo de adentrarse en un ámbito de sencillez y silencio. Quedaría, finalmente, la expresión«oración contemplativa». Incluye en sí todos los aspectos antedichos, pero, precisamente por ello, resulta demasiado indeterminada para poder ser usada con seguridad. Seguidamente, hablaremos sencillamente de «meditación», y el lector sabrá darle los diversos sentidos que acabamos de indicar.
* * *
Esta oración está especialmente vinculada con la verdad. La oración «vocal» –término que tampoco es adecuado– se dirige a Dios para decirle algo determinado. Se apoya, ciertamente, en la verdad de la fe, pero no se ocupa inmediatamente de ella; se consagra a la adoración, la petición y el agradecimiento. La meditación, en cambio, busca la verdad sagrada en cuanto tal. Quiere conocer quién es Dios; comprender qué significa su Reino; tener claridad acerca de lo que debe ser la vida humana; lograr una idea precisa de la propia existencia y formarse una adecuada imagen del mundo.Esta búsqueda de la verdad no es, sin embargo, un mero quehacer del entendimiento. En tal caso, produciría una teología o una filosofía. Para alcanzar el conocimiento que aquí se persigue, debemos movilizar todas las vertientes de nuestro ser. La imaginación y la fantasía intuyen, captan en las expresiones la interioridad, se dejan iluminar por el símbolo. El entendimiento somete a prueba, profundiza, compara, ensambla lo particular en el conjunto y comprende el contexto a partir de lo singular. La facultad de juzgar distingue lo esencial y lo accidental, el fin y los medios, lo valioso y lo no valioso, y luego toma postura ante ello. El sentimiento se siente afectado, elevado y sobrecogido, percibe lo que pertenece a uno y lo que le es ajeno, experimenta anhelo y plenitud. El hombre, como un todo viviente, se dirige a Dios, y entra con Él en relación de trato y de diálogo.( Continuará)

*Apóstoles de Su Amor*

💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

03 Dec, 21:50


💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💥 *INTRODUCCIÓN A LA VIDA DE ORACIÓN*💥

*Romano Guardini*

"Entrega 53*

🌱 *IV- LA ORACIÓN VOCAL*🌱

*LA ORACIÓN VOCAL DE REPETICIÓN Y SOSIEGO CONTEMPLATIVO*
( continuación)

Naturalmente, la letanía debe ser recitada adecuadamente. La forma como se reza a veces resulta infecunda. El bien que nos hace y la belleza que implica la letanía se descubre cuando se pronuncia claramente cada invocación y, tras la respuesta del pueblo, se hace una pausa breve, justo lo suficiente para dar al contenido de la petición anterior un cierto campo de resonancia y evitar que las invocaciones se sucedan con una velocidad maquinal. Si se hace así, se logrará sin pretenderlo que tampoco las respuestas sigan a las invocaciones precipitadamente, sino que entre ambas se deje una pequeña pausa y, de este modo, se extienda la paz de Dios sobre todo el conjunto [4].

* * *
Otro ejemplo de esta forma de oración es el «Ángelus». Tres veces al día –al amanecer, al mediodía y al atardecer– recordamos el acontecimiento que dio origen a nuestra redención: el mensaje del

ángel a la futura Madre del Señor. Esta oración debe ser un recuerdoreflexivoy,portanto,unmomentodereposo.El«Ángelus» es rico de contenido y, al mismo tiempo, tan sencillo que puede ser recitado en todas partes: en casa, en el campo, al ir por la calle.Tres breves frases expresan el misterio: «El Ángel del Señoranunció a María, y concibió por obra del Espíritu Santo»... «Maríadijo: He aquí la esclava del Señor, hágase en mí según tupalabra»...«El Verbo se hizo carne y habitó entre nosotros». A cada frase sigue un Ave María. Mientras la reza, el creyente asume el misterio enunciado y deja que resuene en su interior. Tiene, así, la posibilidad de mantenerse un rato meditando.
El hombre de la ciudad, que ya no vive según el ritmo solar y casi nunca oye el tañido de las campanas, ha perdido casi del todo la oración del «Ángelus». Sin embargo, al mediodía y al atardecer podemos pensar que, a lo largo del mundo, hay todavía muchos corazones que recuerdan devotamente en esos momentos el misterio de la Anunciación, y unirnos a ellos.
* * *
Debemos mencionar el Santo Rosario como una de las oraciones de este género más practicadas. El Rosario aúna de modo perfecto las dos características de este modo de oración: la capacidad de crear un ámbito de meditación repitiendo diversas oraciones y ahondando lenta y progresivamente en los misterios de Dios. No podemos explanar esto aquí. Deberíamos comenzar exponiendo las dificultades que esta forma de oración plantea especialmente al hombre de hoy y los fallos que se cometen en el modo de realizarla. Luego habríamos de exponer en qué consiste, cuál es su articulación interna y de qué forma ha de ser llevada a cabo. Esto nos llevaría demasiado lejos. Por eso me limito a indicar que este temalohetratadoenunbreveescritotituladoEl Rosario de NuestraSeñora . ( Continuará)

*Apóstoles de Su Amor*

💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

02 Dec, 22:10


💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💥 *INTRODUCCIÓN A LA VIDA DE ORACIÓN*💥

*Romano Guardini*

*Entrega 52*

🌱 *IV- LA ORACIÓN VOCAL*🌱( Continuación)

*LA ORACIÓN VOCAL DE REPETICIÓN Y SOSIEGO CONTEMPLATIVO*

El próximo capítulo tratará de la meditación. Al concluir el presente capítulo debemos referirnos a una forma de oración que ocupa un puesto intermedio entre la oración vocal y la meditación y desempeña un papel importante en la vida cristiana.En la oración vocal expresa el hombre lo que le sugiere su corazón respecto a Dios. A esta clase de oración se refiere la advertencia del Señor: «Cuando oréis, no debéis hablar mucho,como los paganos, que creen que serán oídos debido a sus muchas palabras» (Mt 6, 7). El hombre que habla con Dios debe hacerlo de forma sencilla, respetuosa y confiada, y decir sólo lo que de por sí merece ser dicho. Naturalmente, puede repetir algo, como también a las personas se les dice lo mismo más de una vez, y siempre suena bien y resulta auténtico porque lo que uno siente no se expresa debidamente en una sola palabra. El «parloteo de los paganos», del que habla Jesús, no consiste en repetir una oración muchas veces, sino en el modo de rezarla y en la pretensión de influir sobre Dios con la profusión y exquisitez de las palabras.
Puede también suceder que el hombre, además de decir a Dios algo concreto, quiera permanecer en un ámbito de oración, respirar hondo y moverse en él. Podemos ponernos en camino con la intención de llegar a la meta; en tal caso, recorremos el camino rápidamente y sin ninguna pausa. Pero podemos querer dar un paseo. Para ello, nos tomamos tiempo suficiente y nos detenemos donde hay algo interesante. Esto se da también en la vida religiosa, y no sólo es lícito sino importante y bello.
Lo ideal sería tener muchas cosas que decir a Dios, como a un buen amigo, ser capaces de oír su respuesta y demorarnos en este santo coloquio. Pero ¿quién es capaz de ello? A diario vemos lo difícil que es nuestro trato con Dios y qué pronto lo dejamos. No queda, pues, otro camino que el marcado por la oración cristiana desde los primeros tiempos, a saber: repetir ciertas oraciones muy puras y ricas de contenido, de modo que se cree un ámbito de oración en el que pueda reposar el espíritu. Y vincular tales oraciones mediante una idea conductora que se vaya enriqueciendo y evite la monotonía provocada por la repetición.
* * *
Una forma antiquísima de este modo repetitivo de orar es la letanía. El que preside la asamblea recita ciertas invocaciones, en las que nos dirigimos a Dios,destacando algún aspecto de su gloria o de sus obras. El pueblo responde con frases breves, que se repiten una vez y otra; por ejemplo: «Ten piedad de nosotros» o «Te rogamos, óyenos». Estas respuestas recogen el sentido de la invocación, y le dan una larga resonancia. Por otra parte, dichas respuestas, idénticas en sus palabras, adquieren en cada caso un carácter nuevo debido al contenido cambiante de las invocaciones. En este ámbito de diálogo puede reposar el corazón del creyente. Una petición única acabaría demasiado pronto, y la mera repetición sería monótona; en la letanía, el acto de oración adquiere en cada momento un sentido nuevo y, al mismo tiempo, crea un ámbito de reposo espiritual.( Continuará)

*Apóstoles de Su Amor*

💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

01 Dec, 22:16


💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💥 *INTRODUCCIÓN A LA VIDA DE ORACIÓN*💥

*Romano Guardini*

*Entrega 51*

🌱 *IV-LA ORACIÓN VOCAL*🌱

*LA PALABRA DE ORACIÓN RECIBIDA* ( continuación)

Pero existe una oración que es válida por sí misma y necesaria para todos los hombres:la oración del Señor. Nadie puede decir que tiene tanta experiencia de la vida del espíritu que no necesita del Padrenuestro. Delataría una situación de ofuscamiento y soberbia. El Padrenuestro será siempre la escuela de oración, pues fue el Señor mismo quien se la dio a sus discípulos cuando le dijeron:
«Enséñanos a orar» (Lc11,1-4).
Estas oraciones no son únicamente una doctrina y una escuela; son importantes también en otro sentido, más oculto: constituyen una parte de la nueva creación. En ellas vive el hombre nuevo. Están orladas de misterio, y se hallan en conexión con los Sacramentos,de los que brota y en los que madura la nueva vida de los creyentes. El que recita tales oraciones construye el mundo futuro.
No son del mismo rango, pero se hallan en íntima conexión con ellas las oraciones que incluye la Iglesia en la liturgia. No hay que exagerar; las oraciones litúrgicas presentan grados de calidad muy diversos. Muchas de ellas ofrecen admirables posibilidades para hablar con Dios. Pensemos, por ejemplo, en el magnífico «Gloria» de la Santa Misa, en el himno «¡Ven, Espíritu Santo!» de la festividad de Pentecostés, en algunos himnos del breviario y en muchas oraciones de la Misa ,con su severa belleza y su claridad... Estos textos provienen de la Iglesia primitiva. Tienen un gran porte y están inspirados por una idea de Dios majestuosa y sublime. No podemos, pues, hacer nada mejor que utilizarlos a menudo en nuestra oración privada y aprender de ellos.
* * *
Es importante encontrar las oraciones adecuadas. No nos referimos a las oraciones reveladas, que constituyen la «ley divina de la oración» y sirven para todos, aunque cada uno debe saber si, en un momento concreto, un salmo le ayuda o le entorpece, y cuándo puede serle provechoso un himno y cuándo no. A una selección todavía más rigurosa han de someterse los numerosos libros de oraciones que circulan entre nosotros.
En este punto conviene hablar con franqueza. Muchos de esos libros son superfluos. Otros, desgraciadamente no pocos, significan para la vida interior lo mismo que los manjares deteriorados o corrompidos para la vida corporal. La oración debe ser, ante todo, auténtica. Ahora bien, una oración que constantemente se aleja del tono sencillo de una conversación y se hace exagerada es inauténtica. Lo es toda oración melosa y sentimental que presupone unos sentimientos que una persona sincera, espiritualmente sana, no puede albergar. También son inauténticas las oraciones en que el hombre se humilla ante Dios de un modo falso, se hace el malo y disfruta con su propia culpabilidad. Esto tiene, en casos, raíces fácilmente cognoscibles y poco loables. Quizá pueda parecer insólito que hablemos del pundonor cuando tratamos de nuestra relación con Dios. Este sentimiento es harto problemático, y algunas de sus manifestaciones no tienen realmente nada que ver con lo divino. Pero otras sí, y no sólo por lo que toca al hombre, sino también a Dios. Se habla de su honor y gloria; pero el «honor» solo puede darse en un clima de «honorabilidad». Dios es el Ser Libre y Noble por excelencia, y sólo puede sentir agrado ante una humildad que sea interiormente limpia .
( Continuará)

*Apóstoles de Su Amor*

💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

30 Nov, 21:13


💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💥 *INTRODUCCIÓN A LA VIDA DE ORACIÓN*💥

*Romano Guardini*

*Entrega 50*

🌱 *IV - LA ORACIÓN VOCAL*🌱


*LA PALABRA DE ORACIÓN RECIBIDA*

Obviamente, no debemos agravar nuestra indigencia espiritual, y, cuando las palabras se resisten a brotar de nuestra interioridad, debemos tomarlas de otra parte.Hablamos a menudo de la«Comunión de los santos», pero esta expresión es casi siempre malentendida. En rigor, no significa la comunidad de las personas santas entre sí o la comunidad que formamos los creyentes normales con las grandes figuras que llamamos «santos», sino la comunidad de los que creen en las realidades santas: la fe, el Evangelio, la Eucaristía, todo lo que pertenece a la vida divina. Por eso, cuando del corazón de un hombre han brotado vivas y bellas palabras de oración, es justo y hermoso que los demás las usemos también, constituyendo así una comunidad en lo santo.
Hay también otra razón por la que no sólo podemos sino debemos recurrir a fórmulas de oración válidas que han brotado de labios ajenos, y es que podemos aprender de ellas. Hemos visto que, al hablar no sólo expresamos nuestra interioridad, sino que nos movemos dentro del amplio mundo de los contenidos significativos que denominamos «lenguaje». No tomamos únicamente las palabras aisladas que se han formado a lo largo del tiempo, sino también tramas de palabras, modos de expresión y frases que otros han formulado y que, al hacerlas nuestras y asumirlas, nos transmiten toda su fuerza.Lo mismo sucede en la oración. Las fórmulas de oración de hombres piadosos contienen sus experiencias y su esfuerzo por superarse. Al utilizarlas, se convierten para nosotros en una escuela. No sólo aprendemos a expresar lo nuestro, sino que se despiertan en nosotros ciertas experiencias dormidas. Sobre todo, las oraciones de los santos aportan, con frecuencia, nuevos descubrimientos en la vida de unión con Dios; nos muestran caminos que conducen a Dios y nos facilitan posibilidades para una existencia renovada. Una buena oración puede ser para el espíritu lo que el pan para el hambriento, la medicina para el enfermo, una flor para quien se halla agostado por la gris monotonía de lo cotidiano.
Algunas oraciones proceden incluso de Dios mismo y forman parte de la Revelación. Estos textos no sólo nos dicen quién es Dios, sino también cómo llegamos a Él, pero no en forma de instrucciones sobre la oración, sino en cuanto ellos mismos son oraciones. Nos toman de la mano y nos guían. Los salmos, por ejemplo, no sólo son importantes y preciosos; son necesarios. Brotaron de un corazón orante, pero no sólo de sus experiencias particulares –por así decir–, sino de su intención de representar a todos los creyentes. El Espíritu de Dios los inspiró, a fin de que sean una escuela de oración para todos. Lo mismo cabe decir de las grandes oraciones que contienen los evangelios: el «Magnificat» (Lc1, 46-55), el cántico de Zacarías, el «Benedictus» (Lc 1, 68-79), el cántico de acción de gracias del anciano Simeón (Lc 2, 29-32). Si se analizan las cartas de San Pablo, se encuentran numerosas oraciones ocultas, que fácilmente pueden separarse del contexto para utilizarlas en la propia vida.
( Continuará)

*Apóstoles de Su Amor*

💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

30 Nov, 17:11


*Estimados orantes de los grupos de Apóstoles de Su Amor*

Queremos transmitirles un aviso práctico importante:

Si se comunican de parte de *Apóstoles de su Amor* en forma privada, no de ningún tipo de información, toda la información se hace exclusivamente por los grupos.

*Apóstoles de su Amor* no solicita ningún tipo de ayuda económica.

Si le llaman o le escriben *pidiéndole un código* recibido en su teléfono… *no debe dar* ese código.
_Ese es el código de seguridad de WhatsApp. Hay personas malintencionadas que están haciendo eso_

_Pero no pasa nada, no se preocupe._

En ese caso, debe avisarnos, indicando el número de teléfono de esa persona. Para ello, escriba a su administrador para informarle de la situación.

Como puede ver, el procedimiento es muy simple.

No se preocupe.

_Dios nos siga bendiciendo_

*Apóstoles de Su Amor*

🙏🏼

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

29 Nov, 22:03


💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💥 *INTRODUCCIÓN A LA VIDA DE ORACIÓN*💥

*Romano Guardini*

*Entrega 49*

🌱 *IV- LA ORACIÓN VOCAL*🌱

*LA PALABRA PERSONAL DE ORACIÓN*

La oración más llena de vida es la que brota del corazón del que ora. Cuando presenta a Dios su arrepentimiento, sus anhelos, su adoración y su alegría, su súplica y su agradecimiento, estamos – por así decirlo – ante el lenguaje originario de la oración...Pertenece al desarrollo del hombre aprender a hablar, adquirir la misteriosa capacidad de comunicar sus pensamientos y mostrar a los demás cuál es su actitud respecto a ellos. La cualidad más valiosa de lo que llamamos «formación» consiste en saber expresarse con un lenguaje propio, naturalmente dentro de las posibilidades que nos ofrecen el ámbito de la comunidad a la que pertenecemos y las dotes que uno posee. Cada hombre tiene su propia sensibilidad, ve el mundo con sus propios ojos y tiene sus deseos peculiares. Todo esto tiene que manifestarse en. su lenguaje. Lo mismo puede decirse de la oración. No oramos para que Dios sepa lo que deseamos, pues Él conoce nuestro corazón mejor que nosotros mismos. El que ora vive ante Él, hacia Él y desde Él. Da a Dios lo que es suyo y recibe lo que Él tenga a bien darle. Las palabras de esta oración deben ser, pues, algo suyo propio.La palabra personal brota, a veces, con facilidad. «De la abundancia del corazón habla la boca», dice el refrán. Cuando sentimos la proximidad de Dios o nos vemos angustiados y nos ponemos en las manos bondadosas del Señor de la gracia, las palabras afloran de por sí, y sólo debemos cuidarnos de que sean veraces. Pero, a menudo, el corazón está vacío y el espíritu no tiene nada que decir. Nos hallamos en estado de pobreza, y el hablar se torna dificultoso. Debemos, entonces, aceptar esta pobreza, pues también ella tiene su sentido propio. En ella hemos de acrisolar nuestro temple espiritual, apoyándonos sólo en la fe, en la fidelidad y la obediencia, sin la ayuda del sentimiento. Esta actitud frente al desvalimiento debe inspirar las palabras de la oración, que, para ser auténticas, han de ser muy sencillas. Debemos limitarnos a lo esencial, a simples manifestaciones de fe, de respeto reverencial,de confianza y disponibilidad. Estas palabras no son peores que las que brotan a borbotones; tal vez son incluso mejores. En todo caso, son ahora las justas y no han de ser sustituidas por otras.Conviene notar aquí que no es acertado querer remediar la premiosidad de la palabra propia recurriendo a la palabra ajena. Hemos de perseverar en la escuela de la pobreza interior.En ella se aprende lo que no puede enseñarnos ni siquiera el libro más piadoso. Y aunque las palabras de la oración sólo fuesen éstas:«Creo en Ti», «Quiero obedecerte y comportarme como mejor pueda», «Me encomiendo a mí mismo y a los míos a tu divina providencia», serían ante Dios tan preciosas como los desbordantes discursos que fluyen en un instante de sobrecogimiento.( Continuará)

*Apóstoles de Su Amor*

💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

28 Nov, 23:18


*Estimados orantes*

con mucha alegría les contamos que *se incorpora un nuevo sacerdote a Apóstoles de Su Amor*.

Se trata del padre *Jorge Chicho Cloro* quien, diariamente nos hará llegar su reflexión del evangelio mediante un video breve, conciso y directo al corazón!!!

El material del padre Jorge será compartido en el grupo *Encuentro de la Palabra*, junto con los sacerdotes Cardozo, Casquero y Gallardo, al cual podrán acceder a través del siguiente link en Whatsapp:

https://chat.whatsapp.com/J3tk7rcX2bzF1F6x91emAP

O por Telegram:

https://t.me/EvangeliodiariPGallardoyCasquero

No deje de visitar los otros sitios de Apóstoles de Su Amor en las redes:
https://linktr.ee/Apostoles_de_Su_Amor

Lo invitamos también a que visites y se una a nuestro canal.

https://whatsapp.com/channel/0029VaRdbbl3gvWbLVtaPG27

_Dios nos siga bendiciendo_

*Apóstoles de Su Amor*

🙏🏻

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

28 Nov, 23:11


💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💥 *INTRODUCCIÓN A LA VIDA DE ORACIÓN*💥

*Romano Guardini*

*Entrega 48*

🌱 *IV -LA ORACIÓN VOCAL*🌱

*LAS PALABRAS DE LA ORACIÓN*

Orar es tratar con Dios. Ahora bien, el comienzo de todo trato lo marca el hablar. Y la raíz del hablar se halla en la moción interna del corazón. Este impulso interior puede expresarse en un gesto del rostro, en un movimiento de la mano, en la postura de todo el cuerpo, pero permanece inexpresivo y,en definitiva,indeterminado hasta que alcanza su auténtica definición y precisión en la palabra. Al hablar, nos manifestamos y comprometemos. Cabe, pues, decir con cierto fundamento que orar significa hablar con Dios.
* * *
La oración depende en gran medida de la calidad de las palabras que se movilizan en ella. Sería falso decir que lo decisivo aquí es la disposición interior y las palabras son indiferentes. Bien es cierto que una palabra inexpresiva o inadecuada que brote del corazón es más valiosa que las más hermosas y significativas palabras si tras ellas no hay nada profundo; de modo semejante a como hay personas que apenas logran manifestar su interioridad, pero su actitud espiritual tiene ante Dios mucho más peso que todos los discursos. De lo cual no se sigue que haya de sernos indiferente el modo de expresarnos. Normalmente, si tenemos una disposición interior adecuada para orar, encontramos las palabras adecuadas. Por el contrario, las palabras defectuosas –sobre todo las superficiales, sentimentales o desgastadas– revelan una interioridad que no está en perfecto orden.
A la inversa, las palabras que se pronuncian repercuten, a su vez, sobre la interioridad. Las palabras humanas no son creadas por nosotros en cada momento para expresar nuestra interioridad. Desde niños, encontramos ya elaborado el mundo de las palabras, el lenguaje. Nos sumergimos en él, crecemos dentro de él y nos vemos influidos por él de modo más decisivo que por el paisaje que nos rodea. El lenguaje penetra en las raíces de nuestra vida personal; pensamos dentro de él, sentimos dentro de él, nos relacionamos con los demás por medio de él, aprendemos en él lo que significan las cosas y cómo se usan. Lo mismo cabe decir respecto a la oración. Sólo en muy pequeña medida inventamos el lenguaje de nuestras oraciones; en buena parte lo recibimos ya configurado. Esto implica que dicho lenguaje repercute sobre nuestra interioridad y la modela para bien o para mal.Debemos, consiguientemente, prestar suma atención a las palabras con las que oramos.( Continuará)

*Apóstoles de Su Amor*

💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

25 Nov, 21:35


💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💥 *INTRODUCCIÓN A LA VIDA DE ORACIÓN*💥

*Romano Guardini*

*Entrega 45*

🌱 *LA SANTÍSIMA TRINIDAD Y LA ORACIÓN*🌱

*LA ORACIÓN AL PADRE*( Continuación)

El Padrenuestro sólo puede ser comprendido merced a las enseñanzas que lo enmarcan en el evangelio de San Mateo y que denominamos «Sermón de la montaña». Es clarificado mediante las parábolas –como la del Hijo pródigo– con las que el Señor esclarece la relación del Padre con los hombres. En este contexto debe ser entendido, y entonces se convierte en el camino que nos conduce al Padre. Su rostro resplandece ante nosotros y sentimos el latido de su corazón.
Debido a su riqueza interna, su veracidad y sencillez, el Padrenuestro corre peligro de ser recitado irreflexivamente, con poca reverencia y atención. Sucede esto con tanta frecuencia que es necesario exhortar al cristiano a sentirse responsable de esta sagrada herencia del Señor, y darle el honor debido en privado y en público. El cristiano debe recitarla recogido y atento y poniendo su corazón en todas sus palabras. Sólo entonces se adentra en el hogar que el amor de Jesús nos ha preparado en el seno del Padre.El Señor anunció una buena nueva que casi contiene en síntesis cuanto pedimos en el Padrenuestro: la doctrina de la Providencia. Sobre ello hablaremos después; aquí basta una somera indicación. La oración al Padre está inspirada siempre por la conciencia de la Providencia de Dios. Más aún, esta oración representa en cierto modo el medio en el que se realiza el gobierno providencial del Padre. El que ora pide que se cumpla en él la voluntad de Dios y que toda su vida se sumerja cada vez más profundamente en su Providencia, Se esfuerza por comprender el gobierno providencial del padre, para volver luego a la vida con una confianza renovada.


*LA ORACIÓN AL ESPÍRITU SANTO*

Cuando el Señor se reunió con sus discípulos por última vez antes de su muerte, les dijo: «Estas cosas os he dicho durante el tiempo que he estado con vosotros. Pero el Defensor, el Espíritu Santo que mi Padre os enviará en mi nombre, os instruirá en todo y os recordará cuantas cosas os tengo dichas» (Jn 14, 25-26).Conocer y aceptar a Cristo no es algo que podamos conseguir sólo con nuestras fuerzas. En Cristo se hizo hombre el Hijo de Dios, y ahora vive entre nosotros. Esto no es sólo un gran misterio que supera la capacidad de nuestra mente; es también nuestro «juicio», pues en Cristo, en su ser, en sus palabras y en su vida se hace patente nuestra desorientación. Conocer a Cristo es conocernos a nosotros mismos. Esto no lo consiente nuestro egoísmo; de ahí que comprender y aceptar a Cristo sólo sea posible en el Espíritu Santo
–igual a Él–, por cuya virtud se hizo hombre el Hijo de Dios. El Espíritu Santo nos abre los ojos, alumbra el sentido, mueve el corazón. Con ello queda ya indicado lo que significa, ante todo, la oración al Espíritu Santo: la petición de que nos dé a Cristo.( Continuará)

*Apóstoles de Su Amor*

💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

24 Nov, 20:09


💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💥 *INTRODUCCIÓN A LA VIDA DE ORACIÓN*💥

*Romano Guardini*

*Entrega 44*

🌱 *III- LA SANTÍSIMA TRINIDAD Y LA ORACIÓN*🌱( continuación)

*LA ORACIÓN AL PADRE*

Sólo a través de Cristo llegamos al Padre. Si queremos hablar con propiedad de Dios en cuanto Padre,debemos siempre añadir:«Me refiero a Aquel a quien Cristo llama “mi Padre”». La oración al Padre no está dirigida a una divinidad indeterminada –que todo lo penetra y es percibida a veces en el ámbito de los cielos o en el acontecer cósmico–, sino a ese santo rostro que se nos manifestó por primera vez en las palabras de Cristo y se muestra siempre a todo el que se adhiere con fe a estas palabras. De ese rostro nos dijo Cristo: «Quien me ve a Mí ve al Padre». El poder del Padre, su santa voluntad y su condición de hogar eterno para nosotros se hacen palpables en la proximidad de Cristo y desaparecen cuando nos separamos de Él. Si queremos «ir al Padre», debemos ir juntamente con Cristo; hablarle con las palabras de Cristo, buscarle y dirigirnos a Él con los mismos sentimientos de Cristo. Esto no es un procedimiento artificial y penoso, sino el resultado de la ordenación divina según la cual sólo podemos encontrar al Padre por el camino que Cristo siguió al venir desde Él a nosotros. Esto lo conseguimos en cuanto mantenemos de algún modo la relación con Cristo, nos unimos a Él y permanecemos en su cercanía.Es, pues, imprescindible meditar constantemente la vida De Cristo, ajustar nuestros sentimientos a los suyos, conservar sus palabras en nuestro corazón. No se puede ser cristiano sin ocuparse de Cristo. Si se descuida esta relación, se desciende al nivel de lo mundano. Sólo mediante el trato con Cristo llega la oración hasta el verdadero Padre que está en los cielos.
* * *
El Señor nos indicó de una vez por todas la forma y el modelo de esta oración cuando sus discípulos se dirigieron a Él y le dijeron:
«Señor, enséñanos a orar, como Juan enseñó a orar a sus discípulos». Él les respondió: «Cuando oréis, decid así...», y les enseñó el «Padrenuestro» (Lc 11, 2). No hay palabras que hayan pasado tan a menudo por los labios humanos como esta oración del Señor. Tal repetición es la causa de que haya perdido su auténtico sentido y se haya convertido en ejemplo de oración rutinaria. Los que la rezan conciben a menudo al «Padre» como un indeterminado poder supremo que gobierna el mundo. La «santificación de su nombre» la interpretan como un cierto tipo de respeto reverencial. Su «Reino» es entendido como una actitud benevolente de los hombres, y así sucesivamente. Pero, en realidad, estas palabras tienen un sentido abismal e infinito, que sólo podemos captarlo cuando las comprendemos a la luz del espíritu de Cristo.( Continuará)

*Apóstoles de Su Amor*

💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

23 Nov, 22:04


💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💥 *INTRODUCCIÓN A LA VIDA DE ORACIÓN*💥

*Romano Guardini*

*Entrega 43*

🌱 *III - LA SANTÍSIMA TRINIDAD Y LA ORACIÓN*🌱( continuación)

*LA ORACIÓN A JESUCRISTO*

La oración a Cristo busca el rostro del Hijo que se hizo hombre por nosotros, y lo hace con plena confianza, pues Cristo no es una mera figura histórica que un día estuvo en la tierra y de la que sólo quedan las huellas de sus acciones y obras. Cristo vive. El Cristo que existió en otro tiempo vive aún y vivirá por toda la eternidad; y no en la lejanía, aislado en su gloria, sino cerca de nosotros y vuelto hacia cada uno de nosotros. Todos podemos decir: «El Señor cuida de mí. Me mira. Lleva a cabo mi salvación y me ama».Al esforzarse el cristiano por acercarse de este modo a Cristo, quiere lo mismo que quiere el Señor; pues su voluntad es llegar a ser algo real y poderoso en el interior del hombre. Al esfuerzo que desde la tierra realiza el hombre con sus escasas fuerzas se une, desde el cielo, la acción de Cristo, a quien «se le ha dado todo poder».

San Pablo habla constantemente del misterio que Cristo es, no sólo sobre nosotros o junto a nosotros, sino en nosotros. Al resucitar, Cristo volvió a hacerse hombre en el pleno sentido de la palabra. Pero esta condición humana quedó transfigurada, espiritualizada y divinizada, liberada de las limitaciones propias del espacio, del tiempo y de las cosas, y capaz de penetrar en la intimidad del hombre sin lesionar su dignidad. Así, resultó posible la santa relación por la que Cristo vive en el creyente y éste en Él. La expresión máxima de nuestra relación con el Hijo eterno de Dios es ésta: Él vive en nosotros y nosotros en Él. La relación yo-tú se convierte aquí en una misteriosa unidad. Creer significa estar convencido de esta interrelación y hacerse cargo de ella. Vida cristiana significa vivir conforme a esta unidad. Orar a Cristo implica realizar esta unidad en la oración.
Ese conocimiento íntimo se basa en la fe y en el bautismo, y llega a una singular intensidad y densidad merced a la Eucaristía. En ella, Cristo se nos da constantemente como alimento de nuestra vida. Comer su santo cuerpo y beber su santa sangre tienen el efecto que indican sus palabras: «Quien come mi carne y bebe mi sangre permanece en Mí y Yo en él» (Jn 6, 56). La oración a Cristo está polarizada en torno a este misterio; intenta comprenderlo, realizarlo, morar en él y asumirlo como propio.( Continuará)

*Apóstoles de Su Amor*

💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

22 Nov, 22:01


💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💥 *INTRODUCCIÓN A LA VIDA DE ORACIÓN*💥

*Romano Guardini*

*Entrega 42*

🌱 *III- LA SANTÍSIMA TRINIDAD Y LA ORACIÓN*🌱( continuación)

*LA ORACIÓN A JESUCRISTO*

Al iniciar el análisis de esta forma de oración, podría parecer apropiado comenzar con la oración al Padre. Pero sería un método falso. Suscitaría, al menos, la sospecha de que no sabemos quién es el Padre del que aquí se trata, pues el Padre es un misterio, No es simplemente –como lo describen las distintas religiones– el Ser que todo lo gobierna y cuya solicitud todo lo abarca. En sí, es el Dios desconocido; conocido sólo llegó a serlo a través del Hijo. El Hijo, Cristo, es quien nos permite acceder al Dios vivo y trino. Él es, según propia expresión, la «Puerta». «A Dios –que aquí viene a significar el Padre– nadie le ha visto. El Hijo Unigénito, que está en el seno del Padre, nos lo ha manifestado» (Jn 1, 18).
Para configurar una vida santa –tarea que la oración debe llevar a cabo si quiere ser cristiana– hemos de comenzar por establecer una auténtica relación con Cristo. Él se ha hecho nuestro Hermano y nosotros somos sus hermanos, dice San Pablo (Rm 8, 29). Él es nuestro Maestro y nosotros sus discípulos. «Uno es Vuestro maestro», nos dice Él mismo, refiriéndose a Sí mismo (Mt 23, 8). Él es quien nos precede, sabe el camino, es el modelo; nosotros somos quienes debemos seguirle... «Yo soy el Camino», afirma de Sí mismo,«nadie va al Padre sino por Mí»(Jn14,6).Él es el
Revelador, la expresión viva del Padre; nosotros contemplamos su rostro, y, «si le vemos, vemos al Padre» (Jn 14, 9).
* * *
Orar a Cristo significa introducirse en esta relación, conocerla por dentro y vivir según ella. Orar a Cristo no implica básicamente adorarle o pedirle ayuda. Evidentemente, supone también esto, pero ello es propio de la oración a Dios en general. Lo característico de la oración a Cristo es crear la relación en la que Él nos ha asumido. En esa oración pedimos a Cristo que lleguemos a comprenderle; contemplamos al Señor, meditamos su vida y sus palabras, profundizamos en su verdad; ordenamos y clarificamos nuestros pensamientos según la santa doctrina de Cristo; pensamos lo que debemos hacer para imitarle y estructurar nuestra vida a la luz de sus palabras y acciones. Rogamos a Cristo que nos conceda su amor; ajustamos nuestro corazón a Él –pues es muy distinto de lo que nuestra naturaleza entiende por tal– y procuramos convertirlo en el motor de nuestra vida. Nos situamos en el ámbito de la obra redentora de Cristo y le suplicamos que sea nuestro valedor ante la Justicia del Padre. Le pedimos que nos introduzca en la corriente de vida nueva que Cristo ha suscitado y le rogamos que se realice en nosotros el misterio de la nueva creación.( Continuará)

*Apóstoles de Su Amor*

💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

21 Nov, 22:01


💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💥 *INTRODUCCIÓN A LA VIDA DE ORACIÓN*💥

*Romano Guardini*

*Entrega 41*

🌱 *III- LA SANTÍSIMA TRINIDAD Y LA ORACIÓN*🌱

*LA VIDA INTERNA DE DIOS*( Continuación)

El Nuevo Testamento nos presenta dos interpretaciones de esta Santa Trinidad en un solo Dios. Una de ellas es la que acabamos de exponer. En ella se parte de la relación en que viven padres e hijos, seres pertenecientes a dos generaciones, y se dice: Dios es fecundo. En Él se realiza el misterio del nacimiento. Desde toda la eternidad, Dios es «Padre» –realizando así la unidad perfecta de la maternidad y paternidad terrenas–,y es también Hijo,expresión que
abarca tanto al hijo como a la hija, esto es, a todo participante de la vida. En cuanto Padre, Dios comunica al Hijo la plenitud de su vida y su ser propios. El Hijo, a su vez, no se distancia del Padre, no se constituye en un Dios aparte –por así decir–; permanece unido vitalmente al Padre, hacia el que vuelve por amor y en cuyo seno reposa, como se dice al comienzo del evangelio de San Juan (1,18). Ahora bien, la plena libertad y la subsistencia del ser del Hijo no desgarra la unidad divina merced al poder sagrado de Alguien que tiene un nombre: el «Espíritu Santo». Él es el Amor que une Al padre y al Hijo.La otra interpretación de la plenitud de la vida divina parte de la vida espiritual, que también San Juan nos presenta en el prólogo de su evangelio. En éste se indica que Dios no se desconoce a Sí mismo; sabe que es infinito en cuanto a su ser y su valor. Dios no es mudo; se expresa a Sí mismo en una Palabra eterna y creadora. Dios es aquel que habla y aquello de que se habla. Pero lo hablado, la Palabra o Logos, es tan real, subsistente y vivo como El que habla. La Palabra no está en camino hacia alguien para que éste la perciba, sino que ella misma se convierte –por así decir– en oído. Aquí, la mente debe adivinar algo que ella misma no puede realizar, a saber: que la palabra se convierte en oído, retorna a su origen y se convierte en la autopercepción del que habla. El que aquí habla es el Padre; lo hablado, la Palabra, es el Hijo. Y todo este misterio de unidad y pluralidad se realiza en el Espíritu Santo.
* * *
La Revelación llegó a su plenitud al mostrarnos este misterio de Dios. La Redención implica que el hombre es introducido en este misterio. El Hijo eterno, el Logos, «vino al mundo», «se hizo carne» y compartió nuestra existencia, con lo cual nos asumió también en la suya. El Hijo nos reveló el misterio del volver a nacer; nos anunció que el hombre, que ya posee una vida, debe ser llevado a lo más hondo del ser divino y nacer a una nueva existencia. Ha de participar del puesto que ocupa Cristo en Dios y convertirse en hermano y hermana de Cristo. Debe ir juntamente con Cristo al Padre,en condición de hijo suyo, no por naturaleza sino por gracia.Y esto debe realizarse merced a la fuerza del Espíritu Santo, que quiere ser nuestro Amigo y Consejero (Jn 3, 3-10).
No oramos a un Dios indefinido, tal como lo conciben ciertas formas fantasmales de pensamiento o sentimiento, sino a un Dios vivo y responsable. Él nos ha descubierto su misterio y nos ha dicho«Quién» es. Nos ha manifestado su «Yo» y nos ha revelado su Nombre. Nuestra oración debe, por tanto, dirigirse a Él como Dios Trino, que es como se nos dio a conocer. La oración del cristiano es el trato con este Dios.( Continuará)

*Apóstoles de Su Amor*

💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

20 Nov, 22:00


💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💥 *INTRODUCCIÓN A LA VIDA DE ORACIÓN*💥

*Romano Guardini*

*Entrega 40*

🌱 *III- LA SANTÍSIMA TRINIDAD Y LA ORACIÓN*🌱


*LA VIDA INTERNA DE DIOS* ( Continuación)

También Dios es persona. Pero no como los hombres. Cada hombre es él mismo en su única individualidad personal. No sucede lo mismo en Dios. Si leemos atentamente los evangelios y nos fijamos en el modo como aparece lo divino en Cristo y a su alrededor, y en cómo habla Cristo con «Dios» y le trata, nos sorprende algo muy peculiar. Para Cristo existe solamente un Dios, el Dios vivo y santo, que lo creó todo y es Señor de todo. Sin embargo, en la vida de Jesús se nos manifiesta esta Divinidad con rostros diversos ,por así decir.Jesús nos habla constantemente del
«Padre», vive en relación estrecha e inquebrantable con Él, le obedece incluso en las situaciones más amargas, como se expresa en la oración de Getsemaní: «No se haga como yo quiero, sino según tu voluntad» (Mt 26, 39).
La relación de Jesús con este Padre es distinta de la que tenemos cada uno de nosotros. Es Hijo suyo de un modo que ningún ser humano puede compartir. Nunca se unió Cristo con los hombres en la expresión «nuestro Padre»; nunca se dirigió al Padre a una con los hombres mediante el pronombre «nosotros»; nunca pronunció con los suyos la oración que Él les enseñó. Cuando dice que los hombres deben hacerse «hijos de Dios», esta filiación es esencialmente distinta de aquella a la que se refieren estas palabras : «Todo me lo ha concedido mi Padre y nadie sabe quién es el Hijo sino el Padre ,y nadie conoce quién es el Padre sino el Hijo ,y aquel a quien el Hijo tuviera a bien revelárselo» (Lc 10, 22). Cristo adopta ante el Padre una actitud de obediencia, pero no como una criatura que obedece al Creador. Su obediencia es de la misma condición que el mandato del Padre. Es divina como Él. Ante el rostro del Padre se halla el rostro igualmente divino del Hijo.También se destaca en Dios un tercer rostro, más difícil de captar, cuando Cristo dice que, una vez que Él se vaya, «enviará a los suyos otro consolador», el «espíritu de la Verdad» que «dará testimonio de Él» y «permanecerá con ellos» y les «enseñará y recordará todo lo que Él les ha dicho» (Jn 14, 16-17; 15, 26; 16, 7- 5). Se refiere al Espíritu Santo, que descendió en Pentecostés y asumió la herencia de Cristo y la dirección de la Iglesia.

* * *
Aquí se nos manifiesta un gran misterio. Dios, cuya esencia y cuya vida desborda todo lo humano, es persona también de forma distinta y prodigiosa. Cada hombre es una persona singular:dice
«yo» de un modo individual y único. En Dios hay Tres que dicen«yo». Tres son los rostros que se destacan en su vida. Tres son los modos como se autoposee su vida...El hombre sólo puede decir«tú» cuando se dirige a otra persona. En cambio, Dios encuentra en su misma vida a aquel a quien dice «Tú». El hombre necesita de otro hombre para vivir en comunidad y, por eso, depende de los padres, los hermanos, el esposo o la esposa, los hijos, los amigos, los camaradas y compañeros de trabajo. Dios –El Uno, el Único,el Solitario en su inaccesible soberanía– tiene esta comunidad en Sí mismo. He aquí la revelación más honda de lo que significan las palabras que nos hablan del Dios «vivo» y «rico».( Continuará)

*Apóstoles de Su Amor*

💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

19 Nov, 22:01


💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💥 *INTRODUCCIÓN A LA VIDA DE ORACIÓN*💥

*Romano Guardini*

*Entrega 39*

🌱 III - *LA SANTÍSIMA TRINIDAD Y la ORACIÓN*🌱

LA VIDA INTERNA DE DIOS

A cada persona le hablamos de modo distinto. A un niño le hablamos de forma diferente a la que empleamos con un adulto. No nos dirigimos de la misma manera a una persona espiritualmente despierta que a una espiritualmente embotada. Es diferente nuestra relación con una persona a la que veneramos que con una a la que despreciamos. Cada hombre tiene su modo peculiar de ser, y hablar realmente con él significa establecer contacto con ese modo peculiar de ser.
Mas esto no es todo, pues también respecto a los animales adoptamos distintas conductas. Quien ama a los animales sabe que éstos poseen disposiciones muy diversas y procura comportarse con ellos de modo adecuado a las mismas. Pero en el hombre hay más que un conjunto de cualidades individuales; es una persona.Lo que significa ser persona es difícil de expresar, aunque lo experimentamos claramente en nosotros y en los demás. El término persona alude a lo más íntimo del hombre, al centro que aúna todas las manifestaciones vitales y al punto en el que éstas convergen; al suelo firme en el que se apoya el hombre y al poder de sentirse responsable;en una palabra, a aquello a que aludimos al decir «yo». Si pregunto a alguien: ¿Qué eres?, me responde describiendo su profesión, las circunstancias de su vida, su procedencia, su carácter... Pero si le pregunto: ¿quién eres?, me dirá «soy yo», e indicará su nombre propio, para expresar el carácter único de su ser. Lo que significa aquí el término «yo» es la persona.La persona está siempre presente, pues es la que responde de lo que el hombre es y hace ; pero no siempre se manifiesta, ni está siempre actuante. Unas veces, no actúa en modo alguno; otras, lo hace sólo de modo imperfecto, de forma mecánica o de forma instintiva. El hombre se desliza también fácilmente hacia actitudes impersonales, pues ser persona no es únicamente el presupuesto de la propia actividad, sino una tarea que presenta grandes exigencias. Esto se hace patente de modo especial en las decisiones éticas,cuando el hombre despierta de su vida rutinaria y se plantea la cuestión de si quiere o no obedecer un precepto; decisión que implica luego asumir una responsabilidad. Ser persona es también un don, y se realiza al entrar con otra en una relación
«yo-tú» y sentir respeto hacia ella, o serle fiel, o hacerse responsable de ella. Cuando dos personas se ven de esta forma, se configura en ambas un rostro interior, y surge la persona .( Continuará)

*Apóstoles de Su Amor*

💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

18 Nov, 21:41


💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💥 *INTRODUCCIÓN A LA VIDA DE ORACIÓN*💥

*Romano Guardini*

*Entrega 38*

🌱 *II- LA REALIDAD DE DIOS Y LOS ACTOS FUNDAMENTALES DE LA ORACIÓN*🌱

*MIRADA SINÓPTICA*( Continuación)

Contemplemos el camino recorrido. Hemos mostrado que, en el ámbito del recogimiento, la realidad de Dios se destaca, revela sus diferentes aspectos y suscita las diversas formas de oración.Al comienzo hablamos de la santidad de Dios. Ésta suscita en el hombre la conciencia de que no es santo, y le lleva a reconocer sus culpas, arrepentirse y querer renovarse interiormente. Esa misma santidad de Dios nos hace saber que Dios es quien nos da la salvación; nos inspira el deseo de ir hacia Él y esforzarnos por entrar en comunión con Él. Luego destacamos la grandeza y la excelsitud de Dios. A estas condiciones responde el homenaje de la adoración, en la que el hombre no sólo se inclina ante la imponente grandeza de Dios, sino percibe además el sentido profundo de su condición eterna. Cuando el hombre siente alegría ante la grandeza de Dios, la adoración se convierte en alabanza... Por último, consideramos el poder, la riqueza y el amor solícito y generoso de Dios. Al reconocer el hombre que lo que es y tiene lo ha recibido de Dios como un don, responde con agradecimiento...De este modo se nos manifiestan diversos aspectos del ser de Dios. El hombre responde a ellos movilizando diversas vertientes de su personalidad, y de esta forma configura su verdadero ser. Sólo desde Dios es el hombre auténticamente hombre, y en la medida en que sabe de Dios y se orienta hacia Él asume las riendas de su ser humano,

* * *
Hemos expuesto aquí las formas de oración más fácilmente definibles. Existen, sin embargo, otras formas de oración; numerosas, casi innumerables. Dios es inagotable, y el hombre –en expresión de San Anselmo de Canterbury– es «el inagotable por debajo de Dios». No es –según la ciencia actual– un ser particular junto a otros seres, sino el compendio de todo lo viviente. Merced a esta condición privilegiada, el hombre puede responder a Dios, y cada respuesta es oración.Existe, pues, una forma de oración que responde a la lejanía y ocultamiento de Dios; y, correlativamente, otra que es una reacción a su cercanía, a su autorrevelación y manifestación. Hay la oración que brota de la aceptación de la verdad revelada; la oración que entraña el conocimiento y la confesión de la fe. Pero también se da la oración que manifiesta la falta de conocimiento del misterio y nuestra incapacidad de llegar hasta él. Tenemos la oración de la plenitud, cuando Dios está claramente ahí, y la oración del desvalimiento, cuando Él se ha ido y surge un gran vacío que no puede ser llenado con nada. Conocemos la oración que se realiza en un tiempo en el que todo está abierto de forma confiada; y la oración de la muda perseverancia, cuando no parece haber ahí ni valor ni sentido, ni esperanza ni consistencia... Y así podríamos decir muchas más cosas.

* * *
Por lo demás, las distintas formas de oración están mutuamente vinculadas. Si uno tiene conciencia de su falta de santidad y no advierte al mismo tiempo de alguna forma que, a pesar de ello, Pertenece a dios, puede abocar a la desesperación. Desear la unión con Dios y no reconocerse pecador sería una ofensiva insolencia. De qué forma desemboca la adoración en alabanza ya lo hemos indicado. Si no sintiéramos la alegría que produce contemplar la gloria de Dios, el sentimiento de su grandeza nos oprimiría. Por otra parte, la práctica de la alabanza de Dios podría hacernos demasiado confianzudos si la conciencia de su grandeza, que suscita una actitud de adoración, no nos mantuviera a la debida distancia. La petición y la acción de gracias son dos aspectos de un mismo misterio, a saber: que nuestra vida tiene su origen en la libertad de Dios. Basta una breve reflexión para ver también cómo se

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

18 Nov, 21:41


compenetran la adoración y el arrepentimiento, el anhelo y la alabanza, la acción de gracias y la unión, la petición y la veneración. En el fondo, se trata de diversos aspectos de una misma realidad: la relación viva del hombre con Dios que se hace posible porque Dios se manifiesta al hombre y lo llama hacia Sí.( Continuará)

*Apóstoles de Su Amor*

💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

18 Nov, 16:11


*Queridos Orantes*

Un nuevo ciclo litúrgico comienza y, desde el 20 de noviembre y por las próximas semanas, en el grupo de *Encíclicas y documentos de la Iglesia Católica*, celebramos el gozoso tiempo del Adviento, momento en el cual, vigilantes, preparamos el corazón para la venida del Señor, para recibir al Verbo que se hace carne en un humilde portal y, así, habitar entre nosotros. Pero, ¿cómo nos preparamos para recibir a Jesús esta Navidad?
Compartiremos meditaciones del santo Padre Francisco, san Juan Pablo II y Benedicto XVI. Como cada año, preparemos nuestro corazón para que se convierta en un Belén, lleno de amor y de alegría, en donde, con jubilante esperanza, recibiremos a Jesús.

Podrán ingresar a través del siguiente link. También pueden compartir ésta invitación con sus conocidos:

https://chat.whatsapp.com/FSNh1zo06IH4YctxJS6Y6B

Así mismo, para aquellos que así lo prefieran, podrán recibirlo en el siguiente grupo de Telegram:

https://t.me/enciclicasydocumentos

No dejen de visitar los otros sitios de Apóstoles de Su Amor en las redes:
https://linktr.ee/Apostoles_de_Su_Amor

Los invitamos también a que visiten y se unan a nuestro canal.

https://whatsapp.com/channel/0029VaRdbbl3gvWbLVtaPG27

_Dios nos siga bendiciendo_

*Apóstoles de Su Amor*

🙏🏼⭐️

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

17 Nov, 21:47


💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💥 *INTRODUCCIÓN A LA VIDA DE ORACIÓN*💥

*Romano Guardini*

*Entrega 37*

🌱 *II- LA REALIDAD DE DIOS Y LOS ACTOS FUNDAMENTALES DE LA ORACIÓN*🌱

*LA ACCION DE GRACIAS*( Continuación)

* * *
Existe una expresión en la que esta acción de gracias alcanza una forma verdaderamente sublime, casi diríamos divina.Ya nos
referimos a ella al hablar de la oración de alabanza. Es una actitud espiritual que nos lleva a dar gracias a Dios por ser tan excelso, por existir, vivir y reinar. Pero ¿cómo es esto posible? Dijimos antes que sólo se puede agradecer lo que no viene dado por naturaleza y no es necesario ni basado en un derecho. ¿Puede haber algo más necesario que el ser mismo de Dios? ¿Quién puede tener derecho a existir sino Aquel del que se ha dicho que, por su misma esencia,es«digno de recibir la alabanza y la gloria y el poder»(Ap 4, 11)? Todo esto es verdad. Y sin embargo, la existencia de Dios no es algo que exista ahí sin más. Eso puede decirse también del mundo, aunque en otro sentido. El mundo no está ahí necesariamente, porque procede de la libertad creadora de Dios. Dios tampoco existe así, ya que es el misterio por excelencia, el que constituye en sí mismo un milagro viviente. La palabra «misterio», en su sentido más auténtico, no significa que algo que debe ser esclarecido no lo está todavía; quiere indicar el carácter propio del ser de Dios. Y «milagro» no significa algo que supera las posibilidades humanas, sino algo que recibe de Dios su sentido luminoso, llama al corazón y se muestra como «signo». Todo el que se acerca a Dios percibe su misterio y la fuerza de apelación que irradia su ser soberano. Dios es el único Real, el Esencial y Necesario, pero también es Aquel que despierta una admiración sacra. Pero de la admiración brota la acción de gracias...
Cuando una persona ama a otra –la ama de verdad; no sólo siente respeto o simpatía o inclinación hacia ella, sino establece con ella la relación de íntima pertenencia y confiada donación de sí que implica el amor–, experimenta ante la persona amada una admiración siempre nueva. Puede muy bien llegar un momento en el cual le diga con toda sinceridad: «Te agradezco que seas como eres; te agradezco que existas». El entendimiento no puede dar plena razón de esto, pero el corazón lo comprende. Entre los hombres, este misterio está sólo como entrevisto. En plenitud sólo se da propiamente en Dios. De tal modo es Dios el Misterio por esencia y el Milagro viviente que nos inspira una actitud de agradecimiento tanto más pura cuanto más Él se nos acerca:«Te damos gracias por tu gran gloria»,se decía en el«Gloria»dela Santa Misa.De ahí la importancia, la suma importancia de que el hombre aprenda a dar gracias a Dios. Debe superar la actitud de indiferencia que se adopta ante las cosas cuando se las ve como algo perfectamente natural que está ahí de por sí. Nada es natural en este sentido, pues todo es un don. Sólo cuando el hombre lo entiende así, adquieren todos los seres libertad, en cuanto dejan de estar encerrados en sí mismos.Por la mañana, al sentir la frescura y la pureza de la vida tras el descanso nocturno, es buen momento para decirle a Dios: «Te doy gracias, porque respiro y existo. Te doy gracias por todo lo que tengo y por cuanto me rodea...». Al terminar las comidas, debemos decir: «El alimento que he degustado fue don tuyo. Te lo agradezco». Al anochecer, puede ser ésta nuestra oración: «Que hoy haya podido vivir,trabajar y alegrarme, y encontrar a tal persona y comprobar la fidelidad de tal otra... me lo has concedido Tú. Por todo ello te doy gracias». Debemos dar gracias a Dios por la fe, por el misterio de haber renacido a la vida de Dios, por la santa relación que nos une íntimamente a Él. Aún más, hemos de esforzarnos por ampliar nuestra acción de gracias a todo lo penoso. Lo que en la buena nueva de la Providencia divina exige mayor valentía pero también significa la promesa mayor es la idea de que todo lo que sucede, incluso lo penoso, amargo e incomprensible, es una forma de gracia.

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

16 Nov, 21:56


💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💥 *INTRODUCCIÓN A LA VIDA DE ORACIÓN*💥

*Romano Guardini*

*Entrega 36*

🌱 *II- LA REALIDAD DE DIOS Y LOS ACTOS FUNDAMENTALES DE LA ORACIÓN*🌱

*LA ACCIÓN DE GRACIAS*( Continuación)

Otras realidades vienen a la existencia merced a la interacción de diversos seres. Así, el niño procede de la vida de los padres y está por eso vinculado a ellos y a los hermanos. Esta vinculación no se debe a un acto de encuentro sino de procreación. Ese vínculo puede parecer algo natural y necesario, pero no lo es, pues los padres y el niño, los hermanos y las hermanas son personas y disfrutan de libertad. En cierto sentido, estas relaciones, para ser auténticas, tienen que ser asumidas y reafirmadas libremente. Ello indica que esa vinculación tiene la misma inseguridad interior que la señalada respecto al encuentro.Según esto, toda persona vinculada a nosotros es algo«dado».
Por eso debemos agradecer que exista.Lo mismo cabe decir de todo lo que sucede. Las ciencias naturales y las técnicas de planificación y dominio de la vida nos acostumbraron a considerar que todo está sometido a leyes verificables. Creemos que las cosas suceden porque así debe ser según su naturaleza y según las condiciones que nosotros mismos hemos establecido. Todo queda así despojado de misterio o, según alguien ha dicho, «desencantado». Diversos autores, sin embargo, afirman que no debemos pensar así, no sólo porque con ello se pierden muchos aspectos bellos de lo real, sino sencillamente porque es falso. Llega un buen día en que se nos abren los ojos, y tanto las cosas como los acontecimientos presentan un rostro totalmente distinto. Dejan de mostrarse como algo perfectamente natural, explicable porque cumple unas condiciones puestas por la naturaleza, y se sumergen en el misterio. Entonces comprende el hombre que cosas y acontecimientos dependen de un poder superior , respecto al cual las leyes naturales y la organización que el hombre establece juegan el papel de líneas exteriores de ordenación. Tienen, por ello, carácter de «gracia».Todo cuanto sucede se realiza según las leyes de la naturaleza y del espíritu. Pero estas leyes son sólo instrumentos de la libertad de Dios y expresión de la eficacia y solidez de su poder creador. Todo lo que acontece nos viene dado como un don. De ahí que podamos y debamos dar gracias por todo.

* * *
Debemos hablar ahora de algo que reclama nuestra máxima gratitud: el poder de Dios que de forma constante nos gobierna y guía, nos ilumina y santifica. Al hablar de la oración de súplica, quedó de manifiesto que nuestra petición principal no debe consistir tanto en pedir lo necesario para vivir y solicitar ayuda en situaciones difíciles cuanto en abrirse a la energía que procede de Dios y merced a la cual vivimos y existimos. Nuestra existencia es como un arco, uno de cuyos extremos descansa en nosotros mismos y el otro
–el más importante, el decisivo– se apoya en Dios. La oración de súplica debe ser, pues, el ruego constante de que ese arco santo llegue hasta Dios. Y la acción de gracias será la respuesta al hecho de que ese arco llegue sin cesar hasta nosotros. Puede expresarse así: «Te doy gracias, Dios mío, porque vivo gracias a Ti. Te agradezco que pueda ver merced a tu luz, actuar mediante tu fuerza, santificarme participando de tu amor».Desde esta perspectiva alcanza también su verdadero sentido nuestra relación con los hombres, las cosas y los acontecimientos. Todos ellos se nos presentan no sólo como partes de un mismo mundo –al que también yo pertenezco–, sino como mensajeros y mediadores del amoroso gobierno de Dios en el mundo.Lo que debe pedir el cristiano, ante todo, es que se realice cada vez de modo más libre y puro la voluntad de Dios en el mundo. Su acción de gracias consiste en interpretar de forma cada vez más consciente e íntima dicha voluntad divina como un don de Dios.( Continuará)

*Apóstoles de Su Amor*

💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

15 Nov, 22:10


💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💥 *INTRODUCCIÓN A LA VIDA DE ORACIÓN*💥

*Romano Guardini*

*Entrega 35*

🌱 *II- LA REALIDAD DE DIOS Y LOS ACTOS FUNDAMENTALES DE LA ORACIÓN*🌱

*LA ACCIÓN DE GRACIAS*( Continuación)

Tampoco mi misma existencia es algo obvio y natural. Yo me encuentro a mí mismo, vivo en mí, soy yo mismo, y eso me lleva a pensar que mi propia existencia –en mayor medida todavía que la existencia del mundo– es algo sencillamente dado y constituye el presupuesto de todo lo demás que hay a mi alrededor. Sin embargo, sé muy bien que también podría no haber existido... Dos veces hemos utilizado la expresión «sencillamente dado», que tiene un doble sentido muy profundo: Significa que algo está ahí y es presupuesto de todo lo demás; pero dice también que es algo«dado». Es un don, algo que no existe de modo natural y obvio, ni por necesidad ni por derecho, sino que procede de un acto de benevolencia. Debo, en consecuencia, saber también interiormente, con el corazón, que estoy recibiendo mi ser en todo instante como un don que me otorga la mano creadora y generosa de Dios. Normalmente, designamos con la palabra «gracia» lo que no es debido a las posibilidades que nos ofrecen las cosas o los hombres, sino que procede de Dios como un obsequio que nos ilumina, ayuda y santifica. Esta gracia la contraponemos a la «naturaleza».Se puede usar también la palabra «gracia», en un sentido más amplio, para designar el origen de todo lo que no existe por necesidad interior sino por libre donación de Dios. En este sentido constituye una gracia la existencia del mundo, de los hombres, de mí mismo, de todo cuanto existe excepto Dios. Todo es dado; dado por quien es el donante por excelencia.
A veces se puede experimentar con toda intensidad lo incomprensible y desbordante que es el hecho de que uno exista. A pesar de los males y calamidades que uno sufre, es una gracia magnífica que yo pueda respirar y sentir, pensar, amar y actuar; que pueda estar aquí. Y que existan las cosas: el jarrón sobre la mesa, el árbol allá en el campo, el paisaje entorno a mí y el sol por encima de todo. Y los hombres: esa persona a la que amo, y aquella otra por la que me preocupo... ¡Qué profundamente se entiende así que nada es natural y obvio; que todo descansa sobre la libertad gozosa de la benevolencia, y que por todo debemos dar gracias, o, mejor aún, podemos dar gracias!

* * *
Tampoco es natural que existan otras personas, como acabamos de indicar. Cuando nuestra sensibilidad espiritual dormita, aceptamos como algo obvio la existencia ajena; pero, en cuanto despierta, nos abrimos a la verdad. Las relaciones interpersonales valiosas son de dos clases. Unas se basan en el encuentro. Alguien ha venido de alguna parte. Siempre se viene «de alguna parte», desde algún sitio para nosotros no cognoscible del todo, aunque creamos tener muchos conocimientos acerca de ello. Pues ¿qué sabemos de las raíces de la persona que creemos conocer perfectamente? Nos hemos encontrado, y ha surgido eso que llamamos amistad,camaradería o amor.Este acontecimiento parece responder a una necesidad interior, pues, cuando sucede, tenemos el sentimiento de que no cabía otra posibilidad. Sin embargo, tal suceder es «casual», pues podía muy bien no haberse dado.
( Continuará)

*Apóstoles de Su Amor*

💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

14 Nov, 23:30


💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💥 *INTRODUCCIÓN A LA VIDA DE ORACIÓN*💥

*Romano Guardini*

*Entrega 34*

🌱 *II- LA REALIDAD DE DIOS Y LOS ACTOS FUNDAMENTALES DE LA ORACIÓN*🌱( Continuación)

*LA ACCIÓN DE GRACIAS*

Cuando se alcanza el objeto de la petición, surge el agradecimiento. También éste brota espontáneamente del corazón. Al mostrarnos agradecidos,respondemos al don que hemos recibido de Dios. Pero no debemos hacerlo sólo cuando es oída nuestra súplica, sino en toda circunstancia.
Constantemente debe nuestro corazón ,responder, agradecido, a la benéfica acción del Dios bueno y providente. Tal respuesta significa que sabemos bien que todo lo que somos y tenemos y cuanto nos acontece proviene de Dios; y lo reconocemos y agradecemos.
El apóstol nos exhorta: «Sed agradecidos..., y todo lo que hagáis de palabra o de obra hacedlo en nombre del Señor Jesús, dando gracias a Dios Padre por medio de Él» (Col 3, 15-17). Lo malo que es olvidarse de dar las gracias queda de manifiesto en unas palabras salidas del corazón de Dios. Cuando diez leprosos fueron curados y sólo uno de ellos, un samaritano, volvió para agradecerlo, exclamó Jesús: «¿No han sido diez los curados? ¿Dónde están los otros nueve? ¿No hay ningún otro, excepto este forastero, que haya vuelto a dar las gracias y glorificar a Dios?» (Lc 17, 11-19). Estas palabras doloridas del corazón divino recuerdan las quejas que a menudo brotaron de la boca de los profetas cuando el pueblo se olvidaba de Dios, cuyo Amor había hecho con él cosas grandes.Lo que sucede de modo natural no puede ser objeto de agradecimiento. Si conozco las leyes naturales y veo que a una determinada acción le sigue el efecto correlativo, no siento agradecimiento alguno, aunque ese efecto sea para mí altamente beneficioso. Es algo que debe darse necesariamente. Tampoco doy las gracias, en sentido estricto,cuando adquiero una mercancía mediante pago de su importe. La hago mía por mis medios. Sólo cuando una persona, de forma libre y cordial, me hace un obsequio sin tener necesidad u obligación de ello, brota en mí el bello, íntimo y libre sentimiento que se expresa en la frase: «Te lo agradezco».Pero en este momento es importante que reconozcamos, no sólo con el entendimiento sino con el corazón, que, en definitiva, no hay nada que suceda de forma natural. Como ya hemos indicado, eso se da a veces en el mundo, pero, en cuanto atendemos al conjunto de lo que existe, desaparece ese carácter natural. Vivimos en el mundo, recibimos de él las sustancias y las energías necesarias para nuestra existencia, estamos unidos a él por mil relaciones de causa y efecto. Nos parece, por ello, que el mundo es para nosotros algo sencillamente dado, algo que no podemos imaginarnos siquiera que deje de existir. Ese mundo es la «naturaleza», que constituye el presupuesto de todo lo demás. Esta forma de pensar no responde a la fe, pues, en verdad, no es en absoluto «natural» que el mundo exista. No es una realidad necesaria, y podría no existir. Existe sólo porque Dios lo ha querido, y lo ha querido simplemente porque lo ha querido. Aquí desaparecen todos los motivos y comienza la pura libertad. El mundo proviene de la libertad de Dios, y esta libertad es amor. Por eso podemos agradecer que exista el mundo. De ahí que sea un acto noble, elevado y conforme a verdad dar gracias a Dios por haber creado el mundo.( Continuará)

*Apóstoles de Su Amor*

💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

13 Nov, 23:28


💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💥 *INTRODUCCIÓN A LA VIDA DE ORACIÓN*💥

*Romano Guardini*

*Entrega 33*

🌱 *II- LA REALIDAD DE DIOS Y LOS ACTOS FUNDAMENTALES DE LA ORACIÓN*🌱

*LA PETICIÓN*( Continuación)

Constantemente debemos dirigir a Dios nuestras súplicas. No sólo para aliviar nuestras necesidades, sino como una apelación al poder creador de Dios y a su gracia santificante.
De ahí que toda petición implique la condición de que «no se haga mi voluntad sino la tuya» (Mt 26, 39). Nosotros no sabemos si es bueno lo que pedimos cuando nos hallamos necesitados. Ignoramos si la solución que quisiéramos dar a un problema es la acertada. Nuestra vida no puede equipararse a la actividad de un comerciante o un arquitecto que trazan sus planes y actúan según ellos. Sólo en parte se desarrolla nuestra vida en virtud de lo que vemos y comprendemos. La otra parte –la mayor– depende de los designios misteriosos de Dios. A esta parte se dirigen nuestras peticiones; debemos, por ello, estar dispuestos a recibir lo que sea justo y conveniente según tales designios.
Tampoco debemos olvidar que toda petición va impulsada por la voluntad del que pide. Y esta voluntad no siempre implica el deseo bueno y recto de existir y vivir e incrementar la actividad creadora. Puede también responder a la voluntad desordenada de servirse así mismo, convertirse en el centro del mundo y subordinarlo todo a las propias apetencias. También esta actitud egoísta puede anidar en la petición que dirigimos a Dios. Si queremos, pues, que nuestra petición sea acogida por el Dios Santo, Señor del universo, hemos de someter nuestra petición a su juicio y estar dispuestos a que Él la desoiga o la cambie. En el fondo de toda súplica debe latir la petición de todas las peticiones: «Hágase tu voluntad». No sólo porque esta voluntad es irresistible e ineludible, sino porque es verdadera y santa y contiene todo lo que es digno de ser.
Finalmente,la oración de petición no está dirigida únicamente a la suprema Justicia, a la Sabiduría y el Poder divinos, sino al Amor del Dios vivo. Ahora bien, amor es libertad, apertura, donación y espontaneidad originaria. Nuestras peticiones deben colaborar a abrir un ámbito de libertad y de amor. Con nuestros problemas, deseos y anhelos invocamos a Dios para que su Amor actúe con su natural espontaneidad y libertad. La frase: «No se haga mi voluntad sino la tuya» significa, en su sentido más profundo: «Señor, que tu Amor tenga la primacía sobre todo».( Continuará)

*Apóstoles de Su Amor*

💥🌱💥🙏🏻💥🌱💥

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

12 Nov, 22:04


Eso explica que confíe al buen sentir del hombre la tarea de descubrir Su presencia soberana en las cosas, tras la cosas, sobre las cosas y más allá de las cosas. Y esto puede hacerlo el hombre si realmente quiere.

El hombre que ha conocido la crueldad de la existencia puede también creer que Dios es débil respecto al mundo. Todo parece suceder según tiene que suceder. Las leyes de la naturaleza son inquebrantables. En la historia, todo acontecimiento acarrea ciertas consecuencias, y éstas, a su vez, son causa de otros acontecimientos. En la vida individual influyen decisivamente las circunstancias externas, las disposiciones interiores y los actos pasados. No parece quedar lugar para un Dios que actúa y ayuda generosamente. La oración de petición aparece, así, como algo ridículo... También aquí debe el hombre aprender a ver que su experiencia personal es verdadera, pero sólo hasta cierto punto. En ella perece la ingenua forma infantil de vivir la fe –semejante en algún aspecto a la creencia en los cuentos de hadas– y surge la actitud adulta, que se halla atenida a la realidad. En este sentido, esa experiencia personal es positiva. Pero se vuelve destructiva si provoca en el hombre una crispación interior. No debemos, por ello, olvidar que la realidad, con todas sus leyes, está en manos de Dios, y Éste nos ama y desea unirse a nuestro corazón y nuestra voluntad. Cuando esto sucede, nuestra libertad se convierte en un punto de partida para la transformación de nuestro mundo particular. Este mundo no es algo ya acabado y cerrado en sí mismo; es configurado por cada uno de nosotros a partir de nuestra interioridad. El mundo es distinto para cada persona según su modo peculiar de ser y de comportarse.
***
Desde esta perspectiva podemos llegar a comprender lo que es y significa el modo de actuar de Dios. La oración de petición –a una con la actitud de disponibilidad y obediencia propias del creyente– es la actividad espiritual en la que buscamos una y otra vez la unión con Dios. Nuestra experiencia inmediata parece indicarnos que lo único real son las cosas y lo verdaderamente poderoso son los acontecimientos mundanos, de modo que Dios queda como un ser carente de realidad y de poder. De ahí la necesidad de sumergirnos en la idea de que Dios es un ser real eterno e infinito, y de que todo existe sólo por Él y subsiste ante Él. Debo reflexionar sobre la manera de actuar Dios en el mundo, y decirme que Él no opera como un hombre que toma una herramienta y la utiliza; actúa por innumerables caminos escondidos, valiéndose del modo de ser de las cosas, que son sus servidores. El lugar donde Dios opera de modo inmediato es el corazón humano, visto como la fuente viva de su capacidad de querer y de amar. También la soberbia, la actitud del que quiere vivir por sus propias fuerzas, puede obstruir el camino a la oración de petición; y el orgullo del desengaño, que se encierra en sí mismo, y la hipersensibilidad del pudor. El hombre soberbio no quiere pedir nada. Pero debe saber lo peligroso que es esto. El orgullo es una crispación que lo destruye todo. Nosotros vivimos por gracia de Dios. Reconocerlo y vivir según ello es verdad y humildad a la vez, Esto debe aprenderlo el hombre soberbio. Y darse cuenta de que tiene una idea falsa del Dios que nos sostiene y ayuda generosamente. Se ha olvidado de que Dios es el que garantiza nuestro honor. Cierta clase de piedad ha causado en este punto graves daños al pretender ensalzar a Dios rebajando al hombre. Si habla de la misericordia de Dios, esta palabra suena como cuando un rico arroja una limosna a un mendigo. Palabras sagradas, como amor, bondad, gracia, elevación, ayuda y don, son a veces envenenadas por una actitud de rebajamiento y desprecio del hombre que, con razón, ofende a todo el que estime su propia dignidad. Pero esa actitud no es acertada. El hombre no es despreciable. Ha pecado, y lo que esto significa lo vislumbramos al recordar la historia de la humanidad caída –nuestra historia– y al participar en alguna medida de lo que Cristo padeció por nuestros pecados.

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

12 Nov, 22:04


💥🌱💥🙏💥🌱💥

💥 *INTRODUCCIÓN A LA VIDA DE ORACIÓN*

*Romano Guardini*

*Entrega 32*

🌱 *II - LA REALIDAD DE DIOS Y LOS ACTOS FUNDAMENTALES DE LA ORACIÓN*

🙏 *La realidad de Dios y el recogimiento*

Nuestra preocupación pierde su carácter apremiante y angustioso, de modo que, aunque más tarde nos vuelvan a acosar las preocupaciones, al menos durante ese breve rato de oración el espíritu ha podido respirar. Ante este mismo Dios debemos presentar también los grandes problemas de la humanidad: las decisiones de la historia, los problemas del pueblo, las dificultades del momento. Cada uno de nosotros es responsable de toda la comunidad humana. Nuestras posibilidades de intervención activa son generalmente muy limitadas, pero todos podemos llevar en nuestro corazón estas preocupaciones y presentarlas allí donde, en último término, se deciden los destinos humanos. Dios no fuerza a los hombres, pues los creó libres y los guía contando con su libertad. Esta puerta de la libertad se abre en dos lugares: en la actividad que realizamos y en la oración en la que presentamos amorosamente a Dios nuestras inquietudes. Pero esta espontaneidad de la oración de petición puede entrar en crisis. Tal vez, en casos, se nos haga difícil o incluso imposible y debamos aprender de nuevo a realizarla. El curso de la vida nos acarrea muchos desengaños. Hemos orado, quizá, con fervor en una grave dificultad, y creemos que no hemos sido escuchados. Nos hemos sentido abandonados; hemos buscado a Dios y no lo hemos encontrado... Además, con el tiempo la vida nos endurece; queremos apoyarnos en nuestras propias fuerzas e intentamos salir adelante con lo que podamos conseguir nosotros mismos. Todo ello nos desanima para orar e, incluso, nos hace ver la oración como algo sin sentido...
En tales casos, la fe debe ser más fuerte que el sentimiento. Debemos aceptar la afirmación de la Escritura de que Dios nos ama, y orar confiados en ese amor, aunque nuestro corazón nos diga que eso no tiene ningún sentido. Si perseveramos, llegaremos a advertir que Dios nos escucha, aunque quizá de un modo distinto al que esperábamos.

Es también posible que nos dé la impresión de que Dios es indiferente y no se preocupa de los hombres. Dios vive en su mundo lejano y el hombre está perdido en el callejón sin salida de la existencia terrena. Quien ha sufrido mucho puede fácilmente llegar a hacerse esta idea, sobre todo si le falta lo que solemos llamar una «mano amiga» y las cosas se le tuercen, pues pertenece al grupo de esas personas oprimidas, taciturnas y atormentadas a las que todo parece irles mal. Estas personas necesitan la ayuda del amor de los demás. Deberían verse afectadas por el amor y comprobar por sí mismas que la realidad es distinta de lo que ellas piensan. Mientras no suceda esto, deben apoyarse en la fe, que asegura que Dios les ama, y hacerlo una y otra vez. Podemos llegar a tener la sospecha de que Dios es irreal: una idea piadosa, un devoto sentimiento; algo bello pero lejano y pasajero que apenas ejerce función alguna en la vida real... Si sucede esto, debemos aprender a ver que Dios es el ser real por excelencia, más real que las cosas; es el Dios vivo y poderoso. Hemos de esforzarnos por adquirir esta forma de ver a Dios no sólo con la mente sino también con el corazón. Y decirnos a nosotros mismos que el entendimiento puede volverse ciego, el sentimiento embotarse y el corazón llenarse de amargura. Por eso debemos buscar con toda seriedad y sinceridad un punto de apoyo superior a todos ellos. Dios es real, pero su realidad es de un rango muy elevado. Él creó las cosas y las energías que nos rodean, y las dotó de una configuración precisa y de un modo de ser sólido.
Dios no intenta hacer la competencia –por así decir– a este ser, abriendo en él una fisura por la que asomarse. Lo que existe constituye un «mundo», esto es, una trama compacta y llena de sentido, a la que Dios concede todos sus derechos. Dios tiene la honorabilidad de lo auténticamente grande, que no necesita hacerse valer impacientemente.

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

12 Nov, 22:04


Todo esto es verdad, pero la dignidad que el Creador concedió al hombre no queda por ello extinguida, ya que es precisamente ella la que confiere a la culpa su temible gravedad. Todo lo que el hombre recibe de Dios viene inspirado interiormente por una actitud de respeto y estima. Y lo que va del hombre a Dios debe implicar la condición correlativa a esa estima y ese respeto por parte de Dios: la dignidad. Por eso, la oración de petición tiene también cierta dignidad, y la concesión de lo pedido dignifica al hombre.
(Continuará)

*Apóstoles de su Amor*

💥🌱💥🙏💥🌱💥

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

11 Nov, 22:03


💥🌱💥🙏💥🌱💥

💥 *INTRODUCCIÓN A LA VIDA DE ORACIÓN*

*Romano Guardini*

*Entrega 31*

🌱 *II- LA REALIDAD DE DIOS Y LOS ACTOS FUNDAMENTALES DE LA ORACIÓN*

🙏 *La realidad de Dios y el recogimiento*

La petición A este Dios se dirigen nuestras peticiones. La petición corresponde de modo tan cabal a la esencia de Dios y a la verdad del hombre que brota espontáneamente. Si un niño se encuentra en una situación difícil, recurre a su madre. Cuando nos encontramos en una dificultad, buscamos un amigo. De la misma manera, el corazón del hombre tiende a acudir al Dios todopoderoso, del que espera recibir ayuda. Jesús nos enseña que debemos dirigirnos al Padre y pedirle «nuestro pan cotidiano», esto es, todo lo necesario para nuestra vida corporal. Nos exhorta a hacer esto sin grandes aspavientos, con sencillez y confianza, pues «el Padre en el cielo sabe lo que necesitamos antes de que se lo pidamos» (Mt 6, 8). La escena que San Lucas nos relata en el capítulo 11 de su evangelio nos muestra la espontaneidad y naturalidad propia de esta oración de petición. Los discípulos se acercan al Maestro para que les enseñe a orar, simplemente a orar. Y Jesús les enseña el «Padrenuestro», que todo él es una petición. El «Padrenuestro» abarca toda la vida humana, la considera como dependiente de Dios y recibida de su mano. A Dios debemos pedirle todas las cosas: lo que necesitamos para nuestra vida corporal, pero también fuerzas para el trabajo, ayuda en nuestras necesidades espirituales, fortaleza en nuestro empeño moral, conocimiento de la verdad, incremento del amor y de la bondad. El hombre experimenta constantemente su insuficiencia y su incapacidad. Por eso, debe también constantemente dirigirse al Dios rico y fuerte, que no sólo está dispuesto a ayudarle, sino que encuentra en ello su más profundo gozo.
No debemos recurrir a Dios sólo cuando no podemos avanzar más por nosotros mismos. Su ayuda no se limita a suplir nuestras deficiencias. Dicho más exactamente: Lo que pedimos en la oración no es propiamente una «ayuda», que siempre significa algo que se añade a nuestro ser y lo perfecciona; indicamos que toda nuestra vida está ordenada a Dios. Cuanto hacemos depende de Dios y está encaminado a Dios. No existe un ser humano que esté del todo acabado y exista por sí mismo. Ser hombre significa existir desde Dios y hacia Dios. La Sagrada Escritura destaca constantemente este hecho. Basta abrir el libro de los salmos para ver cómo este reconocimiento se traduce en una actitud interior. La petición no debe ser, por ello, una mera solicitud de ayuda. Ante todo, implica el reconocimiento de que el hombre sólo existe merced a Dios, pues de Él y de Su fuerza creadora recibe su esencia y su ser, su vida y su sentido, su energía y su libertad. Todo esto puede ser denominado «gracia» en un sentido amplio, por cuanto procede libre y gratuitamente de la benevolencia de Dios. Pero con mayor razón y en un sentido más propio podemos considerar como una «gracia» todo lo que el amor redentor de Dios nos concede de elevación y santificación, luz y fuerza, dirección interior y liberación del espíritu. El hombre es lo que es porque Dios «obra todo en todos».
El hombre es capaz de apropiarse algo como suyo porque Dios lo da todo. De ahí que la petición más profunda que podemos hacer no consista en solicitar una ayuda concreta sino en pedir la gracia de Dios, entendido este término en sentido amplio y en sentido estricto. Tal petición debe ser constante, porque en todo momento vivimos y actuamos gracias a la intervención divina. Este tipo de oración es tan necesaria como el respirar. Nuestra oración de petición no ha de olvidar a los otros hombres. El creyente debe recordar ante Dios a las personas que ama y le están confiadas. Dios las conoce más profundamente y las ama de forma más pura e intensa que toda otra persona, aunque sea la más allegada, y tiene poder para protegerlas, ayudarlas y bendecirlas.

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

11 Nov, 22:03


Es hermoso acordarse, en la oración, de las personas queridas, asumir amorosamente sus dificultades personales, sus necesidades y preocupaciones, y presentarlas ante Dios. Es bello sentirse unido con Dios en la solicitud por la persona amada, y pensar que ésta queda con ello protegida. Eso nos tranquiliza y nos da confianza.
( Continuará)

*Apóstoles de su Amor*

💥🌱💥🙏💥🌱💥

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

10 Nov, 21:53


La Revelación nos dice que Dios se preocupa de los hombres y los ama. La Sagrada Escritura está repleta de la manifestación del amor de Dios a los hombres. Toda la existencia de Jesús es manifestación de este amor. Es una auténtica Revelación, pues se manifiesta algo que nunca puede ser conocido partiendo del ser del hombre y del mundo: el amor de Dios a los hombres. Esto significa no sólo que Dios desea el bien de sus criaturas, sino que las ama realmente, con toda la seriedad que se manifiesta en su Encarnación; significa que Él mismo se entrega a ese amor, de modo que, por decirlo así, éste se convierte en su destino. Tal amor empieza revelándose en la creación; se hace más ostensible en la ordenación divina de toda la historia de la salvación que conduce a Cristo, y se patentiza plenamente en la persona del mismo, en su conducta y en su vida. Desde Cristo se expande a través del tiempo y del espacio en el gobierno providencial de la historia, en la formación del hombre nuevo y en el desarrollo del Reino de Dios [6].  En el origen de este amor hay un profundo misterio, debido al cual la pregunta de por qué Dios ama al hombre queda, en último término, sin respuesta. El amor de Dios es, por así decir, un riesgo libre, una pura donación, la raíz de la que brota la creación de Sí mismo. Este amor posee, sin embargo, otra cualidad, que no puede ser olvidada si no queremos tener una idea falsa y absurda de él. Este amor debe ser digno de Dios, y, para que lo sea, debe también ser digno del hombre, que es persona. Esto exige que Dios respete al hombre. Como Dios quiso al hombre como persona dotada de la dignidad de ser libre y responsable, se dirige siempre a él según corresponde a la esencia de la persona. Esto no significa que el hombre por sí mismo sea algo en sí valioso que exija respeto por parte de Dios. Lo que el hombre es, su existencia y su dignidad en cuanto persona, lo recibió de Dios. Pero Dios se lo dio con toda veracidad y sinceridad, y por eso lo toma en serio. Precisamente por su propia dignidad divina respeta Dios la dignidad humana. Se debe insistir en esto, pues hay una forma de entender la soberanía de Dios y la dependencia humana que no es digna ni de Dios ni de su creatura. No se honra a Dios deshonrando al hombre. Éste es sólo
una creatura, que, además, ha pecado y está profundamente desordenada. Pero no es una nada o un puro antivalor, sino un ser que ante Dios tiene sentido en cuanto Él le ama.
(Continuará)

*Apóstoles de su Amor*

💥🌱💥🙏💥🌱💥

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

01 Nov, 22:02


💥🌱💥🙏💥🌱💥

💥 *INTRODUCCIÓN A LA VIDA DE ORACIÓN* 💥

*Romano Guardini*

*Entrega 21*

🌱 *LA PREPARACIÓN PARA LA ORACIÓN*

🙏 *El orden exterior*
( Continuación)

Una última reflexión sobre la postura exterior que debemos adoptar. También aquí se han perdido muchos elementos que
pertenecían a la forma misma de la oración. Antiguamente se tenía conciencia de que la postura y el gesto externo no son algo meramente exterior. Ciertamente, pueden convertirse en eso, pero
entonces es que ya están corrompidos. En realidad, todo gesto auténtico nos lleva desde la mano hasta el corazón, que es su origen. Las posturas del cuerpo tienen su raíz en lo más íntimo del
alma.
La postura y el gesto expresan lo que se vive en la intimidad, lo que siente el corazón y piensa la mente. La postura y el gesto, a su vez, repercuten en la intención interior, le dan seguridad, la
estructuran y la educan. Por tanto, no es indiferente la postura en que se ora. Si hay un motivo justificado, se puede orar en cualquier
postura. En circunstancias normales, sin embargo, la postura en que se ora debe exteriorizar la reverencia debida a Dios, pues no
solamente debe orar el alma, sino todo el hombre. Esta postura ayuda, por su parte, a la actitud interior y coopera al recogimiento y
al santo respeto del espíritu a Dios. En este punto debe ver cada uno lo que para él es conveniente.
La postura más apropiada para la oración es ponerse de rodillas.
Expresa el respeto santo ante Aquel que es el Ser por Sí mismo y el Señor, y nos inspira una actitud de seriedad y disponibilidad. Esto
exige que nos arrodillemos realmente y no que tomemos una
postura intermedia entre estar arrodillados y estar sentados. Debe
adoptarse una postura de disciplina y no de mera comodidad. La
molestia que esto tal vez acarree bien puede ser sobrellevada
durante unos minutos. Puede servirnos de norma para determinar la
autenticidad de nuestra oración comparar esta molestia con las que
nos imponemos en nuestras actividades lucrativas o deportivas.
Una hermosa actitud de oración es estar de pie. Los cristianos
antiguos tenían predilección por ella. Posteriormente ha
desaparecido en gran parte. Sería conveniente suscitarla de nuevo,
pues contiene en sí una singular nobleza y libertad de espíritu y, al mismo tiempo, expresa dignidad y prontitud. Por todo ello puede esta postura sernos de gran utilidad para orar en momentos de
depresión espiritual. También es muy útil cuando no sabemos qué decir y, sin embargo, queremos mostrar a Dios nuestra buena
voluntad, ya que esta postura por sí misma quiere decir: «Señor,
aquí estoy ante Ti», o simplemente «Aquí estoy ante Él».
También sentados podemos estar en una auténtica postura orante
si lo hacemos de forma digna y recogida. Esta postura es
especialmente adecuada para meditar y permanecer en silencio ante Dios.
Tan importante como las posturas mencionadas es una forma puramente interior de presencia ante Dios, que puede ser mantenida
sin ser percibida por los demás en el trato con otras personas, en la calle, en las ocupaciones profesionales, en la vida de sociedad. Es
algo muy hermoso y profundo que el cristiano lleve dentro de sí, en medio del mundo y entre los hombres, esta santa presencia de Dios.

Debe sólo evitar hacer ostentación de ello ante los demás o ante sí mismo.
Esta última advertencia vale para todo lo que aquí hemos dicho.
Tan perjudicial como que la vida de oración se agoste o deforme es que el orden y el formulismo se conviertan en una meta y se vuelvan
artificiosos.
La unión de un gesto exterior con un determinado contenido
religioso constituye un signo sagrado. Tal es el signo de la cruz con el que comienza y finaliza la oración. Este signo tiene en sí mismo un sentido propio.
También de él vale lo anteriormente dicho: es expresión de la fe,

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

01 Nov, 22:02


de la devoción y de otros sentimientos espirituales, y, al mismo tiempo, es algo que forma al hombre. Este signo sagrado alberga en
sí un sentido interno y un poder simbólico que no depende del
hombre mismo, sino de la vida cristiana en su totalidad. Pertenece a
la «nueva creación». El que realiza dicho signo se adentra en su área de sentido y se confía a su poder sagrado. De ahí la
importancia de comprender y realizar los signos sagrados como es
debido [10]
(Continuará)

*Apóstoles de su Amor*

💥🌱💥🙏💥🌱💥

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

01 Nov, 16:22


🌹 _*NO SE QUEDEN AFUERA DE LA CONSAGRACIÓN A LA SANTÍSIMA VIRGEN MARIA*_ 🌹

Los invitamos a realizar la preparación para la Consagración a la Santísima Virgen María que finalizará el 8 de diciembre, día de la *Inmaculada Concepción de María.* bajo la guía del Padre Justo Antonio Lofeudo.

Consiste en 33 días de preparación para concluir con un hermoso acto de Consagración. Será un viaje extraordinario de 33 días para entregar nuestro corazón a la Santísima Virgen María, con la inspiración de cuatro gigantes de la espiritualidad mariana: San Luis de Montfort, San Maximiliano Kolbe, Santa Teresa de Calcuta y San Juan Pablo II.

*Daremos inicio el 3 de Noviembre*.

IMPORTANTE Clickee las letras en celeste _*"LEER MÁS"*_

A continuación les compartimos un link para que inviten a sus conocidos y amigos.

https://chat.whatsapp.com/Fr3wRy1oRxUJvbu5sRzTM7

Para aquellos que lo deseen, pueden acceder también a través de Telegram en el siguiente link:

https://t.me/mariaylaeucaristia

No deje de visitar los otros sitios de Apóstoles de Su Amor en las redes:
https://linktr.ee/Apostoles_de_Su_Amor

Lo invitamos también a que visites y se una a nuestro canal.

https://whatsapp.com/channel/0029VaRdbbl3gvWbLVtaPG27


_Dios nos siga bendiciendo_

*Apóstoles de Su Amor*

🌹🌹⭐️🌹🌹

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

31 Oct, 22:06


desgastan con excesiva rapidez y el corazón no sabe qué sentido puede tener esta actividad apresurada y desprovista de contenido.
Debemos tener la necesaria libertad de espíritu para saber
cuándo un asunto es realmente urgente y un cansancio real puede excusarnos de orar. Pero aquí es aconsejable recordar lo que dijimos sobre la astucia propia del hombre, que tan hábilmente sabe
establecer normas a la medida de sus deseos. Fácilmente
desperdiciamos en las cosas más superfluas el tiempo que de modo
tan escaso y fragmentario concedemos a la oración.
* * *
( Continuará )

*Apóstoles de su Amor*

💥🌱💥🙏💥🌱💥

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

31 Oct, 22:06


💥🌱💥🙏💥🌱💥

💥 *INTRODUCCIÓN A LA VIDA DE ORACIÓN* 💥

*Romano Guardini*

*Entrega 20*

🌱 *LA PREPARACIÓN PARA LA ORACIÓN*

🙏 *El orden exterior*
(Continuación)

Un tercer elemento ordenador de la vida de oración viene dado por los acontecimientos de la vida. En otro tiempo, estos sucesos se
hallaban impregnados de significación religiosa, expresada en usos y prácticas llenas de sentido. De todo esto ha quedado muy poco.
En las ciudades, casi nada. Depende de cada uno descubrir y
revitalizar estos restos de prácticas religiosas o quizá encontrar algo
nuevo en este sentido.
Uno de tales restos es la oración antes y después de las comidas.
Esta oración debe ser rezada donde ello sea posible sin provocar
situaciones enojosas. Y ha de hacerse atentamente, de pie y con una buena fórmula [9]. La comida era antiguamente, en todos los pueblos, un acto religioso. Significaba la unión con la divinidad y, a
través de ella, con los demás comensales. Aún hoy se experimenta
algo de esto cuando, en una comida compartida, se establece un
cierto clima de compenetración colectiva que no se explica por el
mero hecho de comer juntos; brota de un estrato de nuestro ser más
profundo. En el fondo, todos admitimos que es algo totalmente
distinto sentarse a la mesa para saborear juntos una comida o bien indicar, mediante la oración, que se recibe la comida de la mano de Dios y darle gracias por ello. Lo humano sigue siendo tan hermoso y
natural como antes, pero se le ha añadido algo nuevo y santo.
La madre debe recitar juntamente con los hijos la oración de la
mañana y de la noche, y esto en forma tal que esos instantes sean
un momento de auténtico recogimiento, a pesar del trabajo
agobiador del día con todas sus contrariedades. En esta oración se
debe hacer referencia, si es posible, a los sucesos de la vida
familiar, con sus alegrías, preocupaciones y pesares, de modo que todo lo que implica esa pequeña comunidad familiar –que es el centro del mundo para sus miembros– sea puesto ante Dios. La
importancia de estos breves instantes de recogimiento supera toda ponderación.
Aparte de esto, existe a veces la posibilidad de realizar alguna
sencilla práctica religiosa familiar. En esta línea hay actualmente ensayos muy prometedores.
Por lo demás, la vida misma ofrece, a este respecto, ocasiones y estímulos. Un feliz acontecimiento hace brotar espontáneamente
una oración, que será distinta de la motivada por una desgracia.
Una época de progreso y de éxito tiene en la vida de oración una
resonancia distinta a la de un tiempo de preocupaciones y
estrecheces. La enfermedad y el restablecimiento, el nacimiento y la
muerte, y, en general, todo lo que sucede en la vida ha de ser
llevado a la oración de tal modo que deje en ella su impronta. Es necesario que afinemos nuestra sensibilidad e incrementemos
nuestra capacidad inventiva. La oración no debe usar siempre los
mismos pensamientos y palabras mientras la vida, con toda su
diversidad, transcurre junto a ella sin llegar a formar con ella una
unidad. Cuanto acontece en nuestra vida debemos referirlo a Dios,
como al Señor y al Amigo, o, más exactamente aún, como al Padre,
al cual le interesa todo lo que nos sucede. En la oración debemos
presentar a Dios cuanto nos ocurre, darle gracias por todo ello, buscar en Él luz y fuerza, pedirle ayuda y descansar en Él.
* * *
También habría algo que decir sobre lo que debe durar la oración.
Ante todo, es importante tomarse tiempo suficiente para que la oración pueda ponerse en marcha, desarrollarse, alcanzar su
plenitud interna y concluir. Si es demasiado breve, adquiere un
carácter de banalidad, de poca importancia e incluso de
irreverencia. En tal caso, los diversos actos, pensamientos y palabras que la constituyen no pueden desarrollarse rectamente, se

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

29 Oct, 20:45


💥🌱💥🙏💥🌱💥

💥 *INTRODUCCIÓN A LA VIDA DE ORACIÓN* 💥

*Romano Guardini*

*Entrega 18*

🌱 *LA PREPARACIÓN PARA LA ORACIÓN*

🙏 *El orden exterior*

Hasta aquí se ha hablado del ejercicio de la oración. Con ello nos hemos referido al orden interno de la oración; esto es, a la trama de
actos y estados psíquicos que hacen posible que una actividad interior tenga sentido. Debemos ahora hablar del orden exterior de la oración. Con ello nos referimos a aquel orden de cosas en que
espontáneamente se piensa al usar este vocablo. Esto exigirá
descender a detalles, con el consiguiente peligro de llegar a
observaciones en exceso meticulosas y, a veces, nimias.
Quisiéramos en este punto conservar la medida justa. La aplicación
concreta de lo aquí indicado es asunto del lector.
En primer lugar existe un orden del tiempo. Este orden se funda en el ritmo de la luz, del que depende también el ritmo del trabajo
externo del hombre y de su vida interna. El ritmo de la luz determina
el día y la noche, la semana de trabajo y el domingo, el año y sus estaciones. Este orden debe también determinar la vida de oración.
Al amanecer se renueva el día. Al atardecer declina. En cada mañana resuena el comienzo de la vida, el nacimiento. En cada
atardecer se esboza el fin, la muerte. Entre la mañana y el atardecer están el trabajo y la lucha, la acción y el destino, el crecimiento, la
fecundidad y el peligro. Todo ello alcanza su expresión en la oración
de la mañana y de la noche [4]. Si éstas faltan, se degrada el día y se hace infecundo.
La semana depende del ritmo de la luna –esto es, del mes– y de las variaciones de la tensión biológica del trabajo y del descanso.
Seis días están destinados al trabajo y uno al descanso. Durante los días laborables está el hombre en estado de servicio; el séptimo día goza de libertad. Esta es la ley esencial de la semana vital, establecida por Aquel que ha creado al hombre y los astros. A esta
ley natural del séptimo día vinculó Dios el precepto espiritual del día
del Señor. Según la Revelación, Dios consumó la creación en seis días y al séptimo día descansó. Tras este séptimo día está el
misterio del descanso de Dios. De ahí que el significado último del
domingo no sea el descanso del hombre, sino el de Dios, y sólo el
descanso de Dios da profundidad al descanso del hombre. A este
descanso de Dios debe el hombre abrirse en su descanso
dominical, así como en su trabajo semanal está al servicio de la
obra creadora de Dios, de la que recibe su sentido auténtico todo trabajo humano.
Al misterio del descanso de Dios se añade el de la Resurrección
de Cristo, que confiere al día del Señor el triunfo de la Redención y
despierta la conciencia de que se inicia la nueva creación. Su luz
llena el día de Pascua y desde él se irradia a todos los domingos [5].
El domingo es, pues, el día del Señor y, consiguientemente, el día del hombre. Su auténtico sentido se ha perdido en gran parte. En el
transcurso de la Edad Moderna se ha transformado en un día de imprecisa solemnidad, para convertirse finalmente en una mera ocasión de descanso y diversión. No se puede aquí dar una norma general sobre el modo de estructurar, sin angostura y violencia, este
día, como día de homenaje al Creador y Redentor del mundo y, al mismo tiempo, como día de alegría ante Dios en un medio social
que cada vez pierde más el sentido de sí mismo. En todo caso, es ésta una tarea que a todos incumbe. La solución no puede venir de
fuera, sino de dentro, profundizando en el misterio de este día,
comprendiendo su íntima conexión con la esencia de la vida natural y espiritual, abriéndose a su belleza interna y preguntándose, desde esta perspectiva, cómo es posible dar cabida a todo ello en la vida
personal y familiar. En la medida en que se comprenda el sentido de este día, dejarán de escatimarse los esfuerzos para la realización de

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

29 Oct, 20:45


este ideal. Se debe también caer en la cuenta de la importancia que
tiene para el Domingo la tarde del Sábado. Según la tradición
eclesiástica, el día comienza con el atardecer –vigilia– del día anterior. Y esto con todo derecho. En efecto, el día comienza con el
despertar; éste es como ha sido el descanso nocturno, el que, a su vez, viene determinado por lo que le ha precedido inmediatamente.
Por tanto, si queremos devolver al domingo su sentido auténtico, debemos comenzar por su prólogo: la tarde del sábado.
La forma básica de articular el fluir temporal viene dada por el año con sus estaciones. El año comprende meses, semanas y días y
está determinado por las mutaciones de la luz solar y por el
despertar, florecer, fructificar y declinar de la vida. Su expresión religiosa se encuentra en el año litúrgico de la Iglesia, en el cual los
sucesos de la vida de Cristo están entrelazados con el ritmo del año
solar. De esta forma se consigue una presencia siempre renovada de la vida del Señor y una vivencia siempre actual de su obra
redentora. El espíritu se siente diversamente afectado en Adviento y en el tiempo de Navidad y Epifanía; en Cuaresma y en el tiempo pascual; en Pentecostés y en las semanas posteriores, que
significan el largo tiempo de la historia y de la espera del segundo
advenimiento de Cristo. Así llegamos al último Domingo del año
eclesiástico, que nos habla del Juicio universal. Este ciclo litúrgico debe determinar también la vida religiosa personal. Antiguamente se
leía en familia el año cristiano. A través de su lectura, los grandes
acontecimientos y los grandes representantes de la obra redentora
influían en la vida religiosa individual. Hoy se ha perdido en gran parte esta vinculación entre el ciclo litúrgico y la vida religiosa
personal, y es una tarea importante restablecerla de nuevo [6]. Vivir
la liturgia, leer escritos apropiados, realizar algunas prácticas
familiares llenas de significación pueden ayudarnos mucho a
conferir a la oración personal, según las épocas, un diverso colorido y un contenido siempre nuevo.
* * *
(Continuará)

*Apóstoles de su Amor*

💥🌱💥🙏💥🌱💥

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

28 Oct, 22:06


💥🌱💥🙏💥🌱💥

💥 *INTRODUCCIÓN A LA VIDA DE ORACIÓN* 💥

*Romano Guardini*

*Entrega 17*

🌱 *LA PREPARACIÓN PARA LA ORACIÓN*

🙏 *EL Rostro de Dios*

(Continuación )

El primer paso en la oración es el recogimiento; el segundo, caer
en la cuenta de la presencia de Dios y de nuestra condición de criaturas; el tercero, la búsqueda de su santo rostro. El hombre que ora se esfuerza en hacerse plenamente consciente de que Dios no es solamente el Señor universal, sino el Tú viviente, ante el que está presente el hombre cuando ora. Dios es Aquel que me conoce, no
como uno cualquiera de los innumerables seres creados, sino en mi condición de persona única e insustituible. Es cierto que no soy nada ante Él; pero Él ha querido llamarme a su presencia y
colocarme en una relación personal con Él, de modo que yo mismo–y yo solo– estoy ante Él. De este misterio de amor vive la oración.
Esto es lo que significa que el hombre debe buscar el «rostro» de
Dios. Podría también decirse, apuntando a un nuevo misterio, que el hombre debe buscar el «corazón» de Dios. Esto no es fácil. Cuando
comienzo la oración, tengo ante mí las cosas circundantes y dentro de mí la maraña de mis pensamientos y sentimientos. En la mayoría de los casos, esto es todo lo que experimento. Ciertamente, me dice
la fe que Dios está ahí. Pero sólo en contadas ocasiones tengo una clara conciencia de ello. Dios está en todas partes pero, por así
decirlo, siempre «al otro lado» y en la oscuridad, desde la cual tengo que creer en Él. Desde el ocultamiento, la oscuridad y el vacío debo buscar, en fe, su rostro vuelto hacia mí, llegar hasta su corazón dirigido a mí y elevar hacia Él mi oración. Continuamente debo
establecer una relación personal de diálogo con Él y restablecerla
cuando se ha roto, lo cual sucede constantemente. A menudo tiende
la oración a ser un mero monólogo o una mera sucesión de palabras. La verdadera preparación para la oración y para su
constante revitalización consiste en convertir las palabras en una
invocación, y el monólogo en un diálogo.
Ante el rostro de Dios alcanza también el hombre su propio rostro real. Lo que nosotros denominamos rostro del hombre no es el
auténtico y profundo rostro humano. Los rasgos visibles del rostro humano no son sino su envoltura exterior. Más allá de esos rasgos se halla la vertiente profunda del rostro: la paz interior, el carácter
del espíritu, la claridad y decisión de la voluntad, la intimidad del
corazón. Normalmente, no nos presenta el hombre más que una
máscara. La vitalidad escondida del rostro del hombre se nos
manifiesta cuando vemos que el rostro de una persona se nos abre
súbitamente en el transcurso de una conversación que le apasiona o de un encuentro que le afecta interiormente. Entonces se percibe
realmente el rostro humano desde dentro. Estos son fenómenos
naturales; pero apuntan a lo divino. El hombre por sí mismo no posee el rostro que cuenta ante Dios. Este rostro lo debe recibir de
Dios mismo. Precisamente al hablar con Él, me convierto realmente en el yo en quien ha pensado Él al crearme y redimirme. En la oración se forma, desarrolla y configura mi auténtico rostro.
(Continuará)

*Apóstoles de su Amor*

💥🌱💥🙏💥🌱💥

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

27 Oct, 22:03


💥🌱💥🙏💥🌱💥

💥 *INTRODUCCIÓN A LA VIDA DE ORACIÓN* 💥

*Romano Guardini*

*Entrega 16*

🌱 *LA PREPARACIÓN PARA LA ORACIÓN*

🙏 *El rostro de Dios*

¿Quién es este Dios al que se dirige el hombre en su
recogimiento y al que se puede dirigir porque Él le concede la posibilidad de hacerlo? Ciertamente, no es el Indecible
omnipresente, el misterio del ser, la profundidad originaria del
mundo o como quiera que se denomine a ese Ser Indeterminado del
que tan a menudo se habla. Todo esto constituye, ciertamente, un
aspecto de Dios y le pertenece, pero es sólo como el aliento y la vibración que de Él proceden y atraviesan el cosmos. Dios mismo es más que todo esto. No es únicamente sentido o idea, sino realidad.
No sólo es profundidad, interioridad, cima o cumbre del mundo, sino un ser en sí mismo. No es mera potencia o fuerza; es «Él».
El principio y el fin de la Revelación consiste en atestiguar que
Dios es «Él mismo». El que en el monte Horeb se manifestó a
Moisés. Y cuando éste preguntó por el nombre de ese Alguien misterioso que se le aparecía, Él respondió: «Yo soy el que soy» (Ex 3, 14). En este momento solemne prescinde Dios de toda
denominación particular –el «Poderoso», el «Justo», el «Benigno»–
y se designa según el modo como Él existe: desde Sí y por Sí, en plena autosuficiencia, Señor de Sí mismo, libre y responsable
únicamente ante Sí mismo. Este «autoseñorío» es su misma esencia.
Dios es «Él-Mismo», esto es, Persona. Y no sólo la más
poderosa, noble y pura, sino la persona por antonomasia [2].
Al hablar de la realidad de Dios, dijimos que ésta es de tal naturaleza que ninguna realidad finita puede ser nombrada junto a
ella. Dios existe por Sí mismo. El hombre existe por Él y ante Él.
Respecto a la personalidad divina, puede decirse también que Dios
es persona por Sí mismo; el hombre lo es en cuanto es llamado por Dios.
Si un hombre, desde la inmediatez de su vida afectiva, habla de «él» (o de «ella»), se refiere, probablemente, a la persona querida
con la que está más estrechamente unido. Pero tan pronto como
pronuncie ese pronombre desde la raíz misma de su ser humano, mentará a Dios, aunque no piense expresamente en Él. Y si un
hombre dijese la palabra «tú» desde la profundidad de su ser y dirigiéndose al Ser en toda su amplitud, con ella invocaría a Dios,
aunque no pensase en Él expresamente. * * *
A este Dios se dirige la oración. Para determinar esta relación, la
Sagrada Escritura emplea una hermosa expresión cuando nos habla del «rostro de Dios».
Esta expresión es, ciertamente, sólo un símbolo, pues Dios, al no tener cuerpo, no tiene rostro como nosotros. Sin embargo, el
hombre –todo el hombre y no sólo el alma– es imagen de Dios, de modo que todo lo que esencialmente le pertenece es también una
manifestación de Dios. Por eso también se da en Dios algo afín al
rostro del hombre, si bien en forma que supera toda representación
humana. El hombre tiene una «figura», por la que está en el espacio y entre las cosas. Esta figura expresa que es una unidad de materia
y energía, una trama de fenómenos y formas; que es capaz de crecer y desarrollarse, de luchar y conquistar; que es sujeto de
derechos y de responsabilidades. «Rostro», en cambio, significa que el hombre es capaz de orientar su interioridad y dirigirla hacia otra persona, ante la que puede mostrarse en amistad o enemistad, en
odio o en amor. Esto se manifiesta en muchas expresiones usuales, como cuando se dice: «El hombre ofrece al destino su frente, mira directamente al peligro, sonríe a alguien...». El rostro es expresión de la persona y de su libertad; al mismo tiempo se manifiesta en él la acogida que se ofrece a otra persona, cuya actitud se acepta.
Todo esto se da en Dios de una manera superior a todas nuestras

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

27 Oct, 22:03


representaciones.
Así dice la Sagrada Escritura: «Dios hace brillar su rostro sobre el hombre». El rostro de Dios es puesto aquí en relación con el cielo, bajo cuya amplia luminosidad vive el hombre (Sal 30 [31], 17) [3].
Dios «dirige su rostro contra el que obra injustamente», haciendo así
referencia a la «tempestad que se prepara sobre el pecador» (Lv 17,
10). También dice la Escritura que el hombre piadoso «se presenta ante el rostro del Señor» (Sal 99 [100], 1, 2). De forma
especialmente bella se nos presenta el misterio del rostro de Dios en el salmo 26: «Tú, oh Dios, nos has dicho “Buscad mi rostro”. Tu rostro, oh Señor, busco yo ahora. No me escondas tu rostro. No rechaces con ira a tu siervo, pues Tú eres mi ayuda. ¡Oh Dios, mi salvador! Mi padre y mi madre me han abandonado, pero Tú, oh
Señor, me acoges junto a Ti» (26 [27], 8-10).
( Continuará)

*Apóstoles de su Amor*

💥🌱💥🙏💥🌱💥

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

26 Oct, 21:26


💥🌱💥🙏💥🌱💥

💥 *INTRODUCCIÓN A LA VIDA DE ORACIÓN* 💥

*Romano Guardini*

*Entrega 15*

🌱 *LA PREPARACIÓN PARA LA ORACIÓN*

🙏 *El Espacio vital de la oración*
*( Continuación)*

En el recogimiento dice el hombre que ora: «Aquí está Dios y aquí estoy yo». Ahora bien, si se penetra hondamente en el sentido de estas palabras, se cae en la cuenta de algo muy importante, al comprender que en ambos casos –«aquí está Dios» y «aquí estoy yo»– el verbo «estar» tiene un sentido diverso. También en la vida ordinaria se da una diversidad semejante respecto al verbo «haber». Si uno pregunta: ¿Qué hay en esta habitación?; y yo respondo: «En el centro hay una mesa, en la ventana una flor, sobre la alfombra un perro, ante mí está sentado mi amigo», en todos estos casos he usado el mismo término [1] respecto a cosas esencialmente diversas. No todas estas realidades existen de la misma forma. La planta, que vive y crece, existe de un modo superior y distinto al modo de existir de la mesa. De un modo más perfecto existe el perro, que me conoce y responde a mi llamada. Y de un modo aún más perfecto e intensivo, al mismo tiempo que radicalmente nuevo respecto a los anteriores, existe mi amigo, como persona dotada de libertad y dignidad y capaz de conocer y de amar.
Incluso entre el modo de «estar» de las personas se dan diversos modos y formas. Unas veces entra una persona en una habitación y, simplemente, «está» en ella, de modo que su presencia sólo implica un mero «estar ahí», que debemos tener en cuenta en nuestros movimientos corporales por la habitación. Otras veces, la presencia de esa persona exige que se la tenga en cuenta en nuestra conversación. Puede suceder que tal persona «esté» de tal manera que se convierta en centro de la reunión. Esto nos lleva a considerar lo peculiar de la presencia de Dios. Dios «está» de un modo totalmente distinto a como «están» los hombres o las cosas.
Dios existe por Sí mismo y desde Sí mismo; de modo que sólo Él es por esencia y en verdad. La Sagrada Escritura expresa esto al decir que Él es «el Señor». Él es el Señor, no porque haya cosas sobre las que Él dispone, sino porque Él «es» «Señor de Sí Mismo»,

«Señor por esencia», con el absoluto señorío de Sí mismo. Yo, por el contrario, no soy desde mí mismo y por mí mismo, sino por Él. No soy por esencia, sino por gracia; no por derecho propio, sino por participación. Mi modo de existir y el de Dios no están unidos por una «y». La frase «Dios y yo existimos» es un absurdo. Intentar tomarla en serio sería una ofensa contra Dios. Respecto a Dios, mi ser está en una relación distinta de la que tiene una criatura con otra: Yo existo solamente «ante Él» y «por Él».
Cuando se alcanza el auténtico recogimiento, se percibe la verdad de todo esto. Se ha aprendido algo muy importante si se sabe que se «existe» ante Dios, solamente ante Dios y que ante Él se existe en verdad. Esto es algo grandioso. Puede ser algo estremecedor, pero también consolador. Veremos cómo a ello responde uno de los actos fundamentales de la oración: la adoración.
 ( Continuará)


*Apóstoles de su Amor*

💥🌱💥🙏💥🌱💥

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

25 Oct, 21:59


La profundidad religiosa de la persona, avivada por este contacto y llamada por esta voz, le busca. Y esto es la religión.
Sin embargo, esta religiosidad es insegura, confusa y está expuesta a engaños hasta que Dios nos habla expresamente, primero por sus enviados y después por su Hijo, Jesucristo. Cuando el hombre se confía a Jesucristo, llega en verdad a la presencia de Dios. Esto se realiza en la oración recta y auténtica. En ella se llega a la santa presencia de Dios. Merced a ella, despierta en la interioridad del hombre no sólo la profundidad religiosa humana, en general, sino el nuevo corazón de los hijos de Dios, corazón renacido y configurado por la gracia.
En este «espacio vital» se muestra la realidad de Dios.
Puede ser que el hombre sienta esta realidad de modo inmediato, de modo que le estremezca con su majestad y le inunde con su cercanía. En tal caso se encuentra el hombre ante el sublime e íntimo misterio de la oración y debe acercarse a él con respeto reverencial, poniendo toda su solicitud en conservarlo. Pero la mayoría de las veces no sucede así, sino que todo permanece en silencio. El Dios, de Quien el hombre que ora ha dicho «Él está aquí», permanece en la oscuridad y guarda silencio. Entonces debe la   oración,     sostenida    por   la     fe,  adentrarse     en    esta    oscuridad silenciosa y perseverar en ella.
 * * *
( Continuará)

*Apóstoles de su Amor*

💥🌱💥🙏💥🌱💥

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

25 Oct, 21:59


💥🌱💥🙏💥🌱💥

💥 *INTRODUCCIÓN A LA VIDA DE ORACIÓN* 💥

*Romano Guardini*

*Entrega 14*

🙏 *El espacio vital de la oración*

El recogimiento crea la apertura y el espacio interno de la oración. Propiamente, esta denominación no es adecuada, pues el espacio o lugar de la oración no se da ni dentro ni fuera, sino «en el espíritu». Y no en el espíritu visto como el lugar donde residen las imágenes del pensar o las intenciones del querer, sino en el «Espíritu Santo». Tampoco es el espacio de la oración un espacio que se constituya a sí mismo, como el espacio en que están las cosas corpóreas, o el espacio de la conciencia, en el que se hallan las representaciones. El espacio de la oración se constituye en la presencia del hombre ante Dios. En esto se asemeja al espacio vital en que están situadas dos personas cuando se hallan en una auténtica relación yo-tú. Este espacio interpersonal se crea merced a la estima, el respeto y el amor que las personas se ofrecen mutuamente, de modo que es
tanto más amplio y profundo cuanto más amplias y profundas son esas actitudes interpersonales. Cuando Dios se acerca a un hombre, permanece junto a él y le rodea con su amor, y cuando el hombre existe ante Dios y se dirige a Él con fe, entonces se constituye ese «espacio sagrado».
Podríamos decir que con el recogimiento se constituye esta apertura interna, y, una vez que surge, puede ya el hombre orante decir: «Aquí está Dios». Pero esta sucesión temporal es algo establecido por nuestro modo de pensar. En realidad, el recogimiento, la apertura de un espacio sagrado, la presencia de Dios y la presencia del hombre ante Él forman un todo. En efecto, el hombre puede recogerse porque Dios se ha vuelto ya hacia él. En sentido espiritual, sólo puedo decir «aquí estoy yo» en cuanto Dios está ahí ante mí y me sitúa ante Él. Es Dios quien, por su venida, crea el espacio viviente que el hombre descubre por el recogimiento y en el que se encuentra cuando está recogido. Dios es quien determina el lugar sagrado al que está destinado el hombre y en el que se encuentra a sí mismo y al mundo en su verdad; en el que es llamado y debe responder. Sin embargo, debemos descomponer esta trama de ideas, para que nuestros pensamientos no se enreden.
El recogimiento tiene la finalidad de que el hombre pueda decir:
«Aquí está Dios, el Dios vivo y santo del que habla la Revelación, y aquí estoy también yo»; no como estoy en la vida cotidiana, como alguien un tanto irreflexivo que se sienta a la mesa en casa, circula por las calles de la ciudad y trabaja en la oficina, sino en mi verdad; en cuanto soy responsable de mí mismo. Aquí está mi «yo» con toda su miseria y, sin embargo, como el único, imprescindible e insustituible «yo» que Dios quiso traer a la existencia cuando me creó y del que puede decirse: «Dios y mi alma, y nada más». Este
«yo» se constituye solamente ante Dios.
En la presencia de Dios se constituye también lo que Él mismo ha depositado en el hombre para que éste le responda: la profundidad religiosa. El hombre vive no sólo a base de ejercitar sus potencias, sino desde distintos estratos esenciales de su vida. La respuesta a una pregunta indiferente, la preocupación por una seria dificultad profesional, la conmoción interna ante una obra de arte y la fidelidad para con una persona amada proceden de estratos de la personalidad que son distintos entre sí e implican una profundidad creciente y una cercanía mayor al fondo auténtico del ser del hombre. Estos estratos de la personalidad sólo se movilizan cuando los aviva algún tipo de realidad que se relaciona con ellos. Muchas veces no conoce el hombre lo que en él late y de lo que es capaz hasta que se encuentra «tocado» en el estrato personal correspondiente. Es lo que sucede con la «profundidad religiosa». Ésta reacciona ante el misterio que late tras las cosas y ante el sentido escondido en los acontecimientos; ante todo aquello que se encuentra en el mundo pero no pertenece al mundo y constituye el testimonio que de Sí mismo da el Dios Creador, presente en todas partes.

💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

24 Oct, 21:59


Con este recogimiento debe comenzar la oración. Tal recogimiento no es fácil. Precisamente cuando más nos esforzamos en alcanzarlo, caemos en la cuenta de hasta qué punto carecemos de él. Tan pronto como intentamos sosegarnos interiormente, perdemos la paz interior; de modo parecido a como una preocupación o un deseo nos acosan por la noche, cuando queremos entregarnos al descanso, con una intensidad que no poseían durante el día. Justo, cuando queremos estar sólo ante nosotros, nos vemos violentamente arrastrados hacia todas partes.

Tan pronto como deseamos alcanzar la unidad interior y ser dueños de nosotros mismos, experimentamos la dispersión o disipación en toda su fuerza. Precisamente cuando quisiéramos estar atentos y abiertos a lo divino, sentimos una apatía y cerrazón de espíritu que abate nuestro ánimo. Todo esto es inevitable y, si queremos aprender a orar, no tenemos más remedio que saber resistir.
Todo depende del recogimiento. Ningún esfuerzo que se haga en este punto es exagerado. Incluso si en ello empleásemos todo el tiempo destinado a la oración, habría que darlo por bien empleado, pues en último término el recogimiento es ya de por sí oración. En períodos de desasosiego, enfermedad o gran cansancio puede muchas veces ser muy provechoso limitarse a esta «oración de recogimiento». Ella nos recogerá, fortalecerá y ayudará. Pero, aun en el caso de que con este esfuerzo por recogernos sólo consigamos ver claramente qué deficientes somos en este aspecto, habríamos alcanzado ya algo decisivo: de alguna manera habríamos ya superado la disipación.
 ( Continuará)

*Apóstoles de su Amor*

💥🌱💥🙏💥🌱💥