En pocos días, Argentina conocerá quién será su nuevo presidente: Sergio Massa o Javier Milei.
La traición, el engaño, la falsedad, la ineptitud, y la oscuridad de un personaje como Massa, es directamente proporcional a los desequilibrios, las psico-patologías, la violencia, y la radicalización de Milei.
A Massa no lo quiere nadie. Ni el propio partido político al que representa. Los únicos que realmente lo aprecian, son los agentes de EEUU con los que opera desde hace años, al igual que los tecnócratas del Foro Económico Mundial.
Para que Massa “compita en las elecciones”, y la gente pueda aceptarlo, tuvieron que ponerle enfrente a un personaje inestable y desequilibrado como Milei, que asuste y meta miedo, hablando de quita de empleos, cierre de instituciones, entre otras cosas. Era la única forma que tenía Massa de conseguir legitimidad, O JUSTIFICAR EL FRAUDE.
Massa promete cambios, crecimiento y progreso, aunque estando en ejercicio no haya hecho nada de eso. Por el contrario, durante su gestión, ha colaborado con el hundimiento del país.
Milei piensa en el futuro y en un país a cincuenta años, citando personajes y modelos del siglo XVIII. Y cada vez que alguien proclama libertad de la forma en la que él lo hace, lo único que podemos esperar, es mayor esclavitud.
La irracionalidad en la que vivimos sumergidos, también es directamente proporcional a las opciones que nos son IMPUESTAS como candidatos. Esto no sólo sucede en Argentina, sino que es un fenómeno (por no decir un modus operandi) a escala planetaria. Así han ido apareciendo personajes cada vez más disonantes y distorsionados, completamente alejados de la realidad, de producir una mejora sustancial en la calidad de vida de las personas.
Las elecciones no son otra cosa que una performance para que el pueblo CREA que vive en democracia y tiene el derecho y la libertad de “elegir” a sus representantes. Si te es difícil aceptar esto, sólo tienes que abrir los ojos para darte cuenta que la única agenda que todos estos individuos vienen implementado exitosamente desde hace décadas alrededor del mundo, es la de la DESTRUCCIÓN.
Destrucción del medio ambiente, las relaciones humanas, la cultura, la familia, la economía, la salud, la educación, el trabajo, el alimento, los sueños, absolutamente todo.
De sus bocas, sólo escuchamos promesas que se esfuman, slogans, y frases que vienen repitiendo desde siempre. Por eso han volcado la política hacia algo pasional, donde no hay lugar para la razón. Porque ya nadie piensa. Habiéndonos acostumbrado a vivir entre la resignación y la mediocridad, teniendo como única vía de escape las redes sociales, en donde vivimos atrapados desahogándonos y percibiendo el mundo, haciendo chistes, enviando memes y videos sobre nuestras desgracias y las barbaridades que los políticos nos regalan burlándose de nosotros.
En cualquier país, aunque los candidatos aparenten defender ideologías opuestas y modelos con los que muchos se sienten identificados, TODOS ELLOS están trabajando para los mismos intereses. Su principal tarea, consiste en mantener a la gente dividida y agrupada bajo discursos, colores y banderas, donde funcionan como intermediarios, a través de los cuales, QUIENES REALMENTE GOBIERNAN LOS PAÍSES DESDE LAS SOMBRAS, pueden hacer llegar sus políticas, reformas, y agendas sobre la población. Utilizando títeres como los que vemos por todas partes, llenando las pantallas de todos los medios, donde ACTÚAN de políticos y funcionarios, que dicen estar comprometidos con causas nobles y argumentan guiarnos por el buen camino, tomando decisiones difíciles, hablando en nombre de la moral, la justicia, el trabajo, la democracia y la libertad, pero en realidad, SON SERES ABOMINABLES QUE TRABAJAN EN CONJUNTO PARA DESTRUIRNOS A TODOS.
Aunque parezca mentira, la gran mayoría de las personas, aún no se ha dado cuenta de esto.
@MovimientoAURORA