La decisión ha provocado una oleada de críticas, especialmente hacia la diputada Jess Phillips, subsecretaria de Estado parlamentaria para la protección de las mujeres, quien argumentó que estas investigaciones deberían seguir siendo competencia de las autoridades locales que las soliciten.
Las críticas hacia el Partido Laborista no son nuevas. Desde 2012, se ha denunciado que durante el mandato de Starmer como jefe del Servicio de Fiscalía de la Corona (CPS), se desestimaron casos debido al origen étnico de los presuntos autores con el fin de «mantener buenas relaciones con la comunidad».
Las víctimas de clase trabajadora blanca, muchas bajo tutela estatal...
GENOCIDIO RAZA BLANCA