Cuentos en viaje es un canal de Telegram dedicado a todos aquellos amantes de la lectura que buscan enriquecer su vida a través de historias fascinantes. Con una amplia variedad de cuentos y relatos cortos de diferentes géneros y autores, este canal te invita a embarcarte en un viaje literario sin salir de casa. Desde cuentos clásicos hasta historias contemporáneas, Cuentos en viaje ofrece un espacio para la imaginación y la reflexión, donde cada relato es una ventana hacia nuevos mundos y emociones. nn¿Quién es Cuentos en viaje? Es tu compañero ideal para esos momentos de relax y desconexión, donde sumergirte en la lectura se convierte en un verdadero placer. Con una comunidad de lectores apasionados que comparten la misma pasión por las historias, este canal es un punto de encuentro virtual para disfrutar de la magia de las palabras juntos. nn¿Qué es Cuentos en viaje? Es un oasis literario en medio del ajetreo diario, donde puedes encontrar inspiración, entretenimiento y momentos de introspección a través de los relatos más cautivadores. Desde cuentos breves hasta narraciones más extensas, Cuentos en viaje te invita a escapar de la rutina y explorar nuevos horizontes a través de la lectura. nnSi eres de los que les gusta enriquecer su vida con la lectura, no puedes dejar de unirte a Cuentos en viaje en Telegram. Déjate llevar por la magia de las palabras y descubre un mundo de historias por descubrir. ¡Te esperamos para embarcarte en este viaje literario inolvidable!
15 Nov, 19:01
02 Nov, 17:01
31 Oct, 17:01
25 Oct, 18:01
11 Oct, 18:02
27 Sep, 18:01
13 Sep, 18:02
30 Aug, 18:01
23 Aug, 16:01
Y tengo un carácter levantisco.
Pero nunca me lo perdonaron.
Me hicieron putada tras putada toda la vida.
Pensé en marcharme del pueblo.
Pero me quedé.
Esperando que todo cambiara.
Y nada cambió.
Estuve solo toda mi vida.
Hablaba sólo con las bestias de casa.16 Aug, 18:02
09 Aug, 16:02
No quiere tener otro hijo. Nunca lo ha deseado, como tampoco deseó al hombre que una tarde se convirtió en su sombra al salir del tercer turno. Tras envolverla con su labia y meterse con ella al cuarto, quitó a Marcelino del catre y lo sacó al patio, para después trepársele encima sin preámbulos ni ternuras ociosas, en una penetración torpe y carente de entusiasmo, antes de desaparecer por siempre de su vida. No tuvo remordimientos: Silvestre andaba lejos y nunca lo sabría. Mas como el encuentro no le dejó ninguna satisfacción, no buscó repetirlo.02 Aug, 18:02
26 Jul, 16:02
Preguntar qué le pasa a ese niño, por qué tienen a ese niño entre los chanchos y la porquería de los chanchos, dónde están los padres de ese niño. Agarrar la mano de mamá con miedo. Bajar los ojos ante la mirada del cabezón. Volver a subirlos para encontrarlo llorando, extendiendo los bracitos a la gente que lo mira. Controlar la arcada cuando un chancho primero olisquea al cabezón y luego se hace caca casi sobre él. Espantar las moscas y los moscardones.19 Jul, 18:01
12 Jul, 16:01
A Fähner le gustaba la naturaleza diáfana del estilo Bauhaus, pero ella amuebló la vivienda con roble y pino, puso cortinas en las ventanas y compró ropa de cama de colores. Fähner transigió incluso con los posavasos de ganchillo y la vajilla de estaño; no quería cortarle las alas.
Unas semanas más tarde, Ingrid le dijo que le molestaba la manera en que cogía los cubiertos. En un primer momento él se rió y se dijo que era una infantil. Ella repitió el reproche al día siguiente y en los días sucesivos. Y como ella se lo tomaba tan a pecho, él terminó por coger el cuchillo de otra manera.05 Jul, 18:00
28 Jun, 16:02
—¿Cómo le ha pasado esto?
—Bueno, se llamaba Bernadette, 22 años, casada. Cabello largo y rubio; se le cae continuamente sobre la cara y tiene que retirárselo…
—¿Veintidós años?
—Sí, vaqueros…
—Es una fea herida.
—Llamó a la puerta. Preguntó si podía entrar. «Claro», le dije. «Estoy lista», dijo. Y entró corriendo en mi cuarto de baño, y sin cerrar la puerta del todo se bajó los vaqueros y las bragas, se sentó y se puso a mear. ¡OOH! ¡JESÚS!
—Calma, calma. Estoy desinfectando la herida.21 Jun, 18:01
14 Jun, 16:02
En lugar de responder, Natalia agarra un paquete de galletitas de la alacena, lo carga con la misma mano que lleva el jugo de manzana y con la otra mano se cuelga al hombro la mochila y le da la espalda para salir de la cocina.
—¿No querés comer algo en serio? —pregunta Jorge, aunque sabe que no es mucho lo que tiene para ofrecer. Es un intento por detenerla antes de que suba la escalera, se encierre en su cuarto y ya no aparezca hasta el día siguiente. Hace una semana que no la ve más que unos minutos cuando vuelve del colegio.07 Jun, 18:02
31 May, 16:02
En la fábrica había un bobo. Era un negro corpulento, fuerte y joven. La gente decía que era sobrino del administrador. Juan el bobo. Barría los pisos por la mañana y vagueaba por allí en las tardes. Estaba fresco como una lechuga. Así está muy bien por ser bobo.
Siempre merodeaba a las mujeres en las oficinas y ellas lo provocaban. El chiste era decirle que la tenía chiquita igual que un niño y que no se le paraba.
24 May, 18:02
17 May, 16:01
De pronto sale corriendo hacia el salón. Ha agarrado de la mesita un paquete irregular envuelto en papel de aluminio. Se asoma a la ventana y llama a Andrés a gritos. Desde abajo, su hermano levanta la cabeza desganado.
—¡Has olvidado la merienda!
Arroja el bocadillo hacia la calle, pero Andrés no consigue atraparlo y el paquete cae rodando por la acera. Daniel lo ve golpearse y girar hasta que Andrés lo frena con un zapato. Entonces oye al bebé que llora solo en la cocina.10 May, 18:02
