El adjetivo mixta ya nos puede dar una idea de cuál es el principal aspecto de este tipo de piel. Y es que la piel mixta combina las características de otros tipos de piel. En concreto nos referimos a la piel grasa y a la piel seca, aunque también se dan casos donde se combinan la piel grasa y la piel normal.
Si alguna vez te han mencionado la piel mixta, seguramente hayas oído hablar de la famosa zona T. La principal característica de la piel mixta es que una especie de zona en la cara es más grasienta que el resto de la piel facial y del cuerpo. Esa zona tiene forma de T y cubre la totalidad de la frente para luego descender por la nariz y llegar al mentón o barbilla.
La textura de esa zona T es más húmeda y brillante, prueba de que hay más niveles de grasa en su composición. Existen, además, otros casos de personas con piel mixta que presentan otras zonas del cuerpo con mayores niveles de grasa. Esa grasa se puede encontrar en el cuero cabelludo o en la espalda por poner un par de ejemplos. Durante la adolescencia, el acné puede ser más pronunciado en los jóvenes con piel mixta, ya que además de la cara puede extenderse por otras zonas del cuerpo.