Gracia: La de Dios
Segunda oportunidad
ROMANOS 5:1-6
La Escritura pinta una imagen sombría de la humanidad aparte del Señor: muertos en nuestros pecados, bajo la ira de Dios, y sujetos a la separación eterna de Él (Ef. 2:1-3). A través de la cruz, se nos da una segunda oportunidad de estar en una relación con el Señor. Cuando confiamos en Cristo, Él derrama su amor incondicional y su gracia sobre nosotros.
Debido a la gracia, hemos sido justificados por la fe. La justificación es una declaración de Dios de que no somos culpables a sus ojos. En la salvación, Jesús murió en la cruz y nos rescató del castigo por nuestras transgresiones. Toda nuestra desobediencia, pasada, presente y futura, está totalmente perdonada.
Obtenemos este notable perdón a través de la fe genuina en Jesucristo, en otras palabras, reconociendo el juicio de Dios de que somos pecadores que necesitamos un Salvador porque no podemos salvarnos a nosotros mismos. La verdadera fe se basa en la creencia de que la muerte de Jesús expió nuestros pecados, Dios aceptó el sacrificio de Su Hijo en nuestro nombre y estamos completamente perdonados. La gracia nos da paz con Dios. Debido a que hemos confiado en Cristo, hemos sido adoptados en la familia del Padre celestial (Juan 1:12-13) y tenemos Su favor para siempre.
A través de la gracia, se nos ha ofrecido un nuevo comienzo. Que podamos aprovechar al máximo esta oportunidad persiguiendo apasionadamente a Dios con todo nuestro corazón.
https://t.me/linwoodspeakstruth/54165